Una campaña de intervenciones quirúrgicas sin precedentes va a ser anunciada en los próximos días en Francia. Las autoridades planean llevar de vuelta al quirófano a unas 30.000 mujeres portadoras de las prótesis mamarias de la marca PIP, que han revelado ser cancerígenas. La decisión del Gobierno llega tras más de un año de lucha de este colectivo, que descubrió cómo la firma les había implantado ilegalmente prótesis fabricadas con un gel industrial, y no de uso médico.

El Gobierno tenía previsto hacer el anuncio el próximo viernes, tras recibir una evaluación del Instituto Nacional del Cáncer acerca de los ocho casos de cáncer ya declarados en portadoras de las prótesis. Pero ayer, el diario Libération afirmó que la decisión del Goya está tomada, cosa que el Ejecutivo no desmintió.

Las afectadas quieren que el erario público cubra los nuevos implantes

Se da por seguro ya que la seguridad social francesa asumirá el coste de la operación y el seguimiento de las pacientes. Por el contrario, sigue pendiente la respuesta a otra exigencia del Movimiento de Defensa de las Mujeres Portadoras de Implantes y Prótesis PIP: que el reimplante de nuevas prótesis, que tiene un coste medio de 3.000 euros, también sea asumido por el erario público en todos los casos. Hasta ahora, el Ejecutivo decía que sólo pagaría la reimplantación en el caso de las mujeres que llevaban las prótesis a causa de una previa ablación del seno por razones médicas.

El análisis del Instituto del Cáncer debe examinar la relación de causa-efecto entre las prótesis y los ocho casos ya detectados. No en vano, desde hace una década, en Francia cada año se declaran entre 42.000 y 55.000 nuevos casos de cáncer de mama, y los implantes PIP pueden estar involucrados en una parte de ellos.

Al menos, como señala el médico de la asociación femenina, Dominique-Michel Courtois, 'ahora todo el mundo está de acuerdo en lo más importante: la necesidad de que todas las portadoras puedan conseguir que se los extirpen'.

En España no hay constancia de casos de cáncer por estos implantes

Los ocho casos 'declarados', que dispararon la alarma hace más de un año, son cinco cánceres de mama convencionales, un caso rarísimo de linfoma de mama que provocó una muerte, un caso de linfoma de la amígdala y otro de leucemia, según Jean-Yves Grall, director general de Sanidad.

Aunque los estudios están en sus inicios, esos casos han sido juzgados reveladores y las autoridades temen que sólo sean la punta del iceberg. Los especialistas convocados en el comité de seguimiento señalan que estas prótesis de la marca PIP tienden a desgarrarse o a sufrir escapes con más frecuencia que las regulares. El gel de silicona contenido además, al ser de uso industrial, provocaría los cánceres al infiltrarse en el organismo.

Mientras tanto, en España el Ministerio de Sanidad no tenía constancia ayer de ningún caso de cáncer relacionado con los implantes de mama PIP, informa Efe. Además, si bien se desconoce 'con exactitud' cuántas mujeres españolas tienen implantadas esas prótesis, en Sanidad están convencidos de que son 'muchas menos' que las 30.000 citadas por el diario Libération, ya que no era una marca mayoritaria en España, donde están retiradas del mercado desde el pasado mes de marzo.