Este artículo se publicó hace 13 años.
Francisco Vázquez vuelve a su trabajo tras 34 años de excedencia
El exembajador insiste en que tiene el apoyo de Zapatero y Rajoy para ser Defensor del Pueblo
El exembajador de España en el Vaticano, Francisco Vázquez, se reincorpora hoy a su puesto como inspector de Trabajo en A Coruña, empleo que abandonó en 1977 cuando se presentó como cabeza de la lista del PSOE al Congreso por A Coruña.
Vázquez, que cumplió 65 años en abril, solicitó su reingreso tras cesar en el Vaticano, porque como funcionario puede permanecer activo hasta los 70 años. La decisión no es casual. Pese a que su condición de exdiputado le da acceso a la pensión máxima, Vázquez ha decidido recuperar su empleo para poder retirarse dado de alta en la Seguridad Social en lugar de jubilarse desde una situación "asimilada al alta", aquella en la que están los trabajadores en excedencia forzosa o los parados.
Oficio de tres añosEl que fuera alcalde de A Coruña siempre se ha vanagloriado de no tener la política como profesión, pese a que sólo ejerció como inspector durante tres años, de los 28 a los 31. Aun así, afirma que gozar de un oficio le ha permitido mantener una postura acorde a sus principios, que no siempre coinciden con el ideario socialista. Contrario a los matrimonios homosexuales y al aborto es católico practicante y es habitual verlo en misa, con su mujer, los domingos, en los últimos tiempos cuenta con más apoyos entre las filas del PP que en el PSOE. De hecho, han sido sus propios compañeros de filas los que han rechazado su nombramiento como Defensor del Pueblo, pese al respaldo popular. El propio Vázquez aseguró ayer que cuenta con el "apoyo de destacadas personalidades españolas" para convertirse en Defensor, entre las que citó a Zapatero, a Blanco y a Rajoy. "También es verdad que hay a quien no le gusta mi candidatura, pero ese tema se resolverá más adelante", zanjó.
Vázquez fue alcalde de A Coruña desde 1983 hasta 2006, año en que abandonó el cargo para convertirse en embajador después de que se conocieran los intereses empresariales de su familia.
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