Este artículo se publicó hace 2 años.
El incendio de Bejís detona antiguas bombas lanzadas en la Guerra Civil
Los vecinos de Ríos de Abajo oyen fuertes explosiones que aseguran haber escuchado en anteriores incendios. El fuego ya ha arrasado con más de 13.000 hectáreas.
Madrid-Actualizado a
El pasado lunes se declaró un incendio forestal en la zona de Bejís, en la comarca de Alto Palancia, en Castelló, que provocó el desalojo de cuatro aldeas y un camping ese mismo día. Las imágenes de los bomberos intentando apagar las llamas de un incendio que avanzaba sin control se hicieron eco en las redes, llenándose mensajes de solidaridad para los equipos que trabajaban por la extinción.
Según informa Levante-EMV, los vecinos de la aldea de Ríos de Abajo, que se encuentra cerca del incendio, han comenzado a escuchar explosiones. Tal y como cuentan los vecinos, esas explosiones se deben a las bombas que en la Guerra Civil nunca detonaron.
"Hay muchas bombas enterradas por esta zona", añaden desde el diario valenciano, que recoge los testimonios de los vecinos de la localidad.
Las bombas de la Guerra Civil
La aviación del bando franquista dejó caer bombas en la zona en plena Guerra Civil. En 1938, los sublevados atacaron la línea de resistencia republicana, denominada línea Matallana, que se situaba entre el municipio de Torás y Bejís. También fue atacada la zona comprendida entre Bejís y Las Ventas.
Las bombas cayeron, pero muchas quedaron sin detonar, por sus características o diseño. A estas bombas se las conocen como 'UXO' (Unexploded Ordnance) y su mínima manipulación puede resultar fatal. Si se encuentran uno de estos artefactos, nunca deben ser tocados ni trasladados de zona.
El fuego, causa de la detonación 84 años después
Los incendios en la zona de Bejís están provocando la detonación de estos artefactos explosivos tras 84 años enterrados. "Y no es la primera vez que pasa porque hace diez años hubo otro incendio y los vecinos cuentan que también se escucharon", explica la vecina de la aldea.
El incendio forestal ya ha arrasado con más de 13.100 hectáreas, superando al devastador incendio de Vall d'Ebo, en Alacant, que quemó cerca de 12.000 hectáreas. Aunque las lluvias menguasen las llamas, Ximo Puig, president de la Generalitat Valenciana, advierte que "un cambio de viento o temperatura pueda reavivar parte del incendio".
La Generalitat tiene a su disposición este jueves 34 medios aéreos con los que tratar de dar el golpe de gracia al episodio de incendios más voraz de cuantos ha sufrido la Comunidad en la última década, según informa Efe. "El incendio no está perimetrado y ya es mayor que el de Ebo. Estamos en el buen camino, pero no se puede dar por estabilizado ni mucho menos", advierte el president.
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