Bares convertidos en clubs gastronómicos, hosteleros que se niegan a vetar el tabaco en sus locales... En los 16 días de Ley Antitabaco, con un cumplimiento generalizado de la norma, los díscolos han sido noticia. La ministra de Sanidad, Leire Pajín, cuantificó ayer, en su comparecencia en el Senado, que la norma se está aplicando con normalidad. Pajín avanzó que las autonomías han recibido 'unas docenas' de denuncias firmes.

Fuentes de Sanidad explicaron que 'no llegan a un centenar', sin hilar más fino. En todo caso, explican, la cifra, que recoge las denuncias firmes que han recibido las comisarías y las consejerías pertinentes, da muestra de que la ciudadanía 'ha priorizado la salud y el comportamiento cívico', aplaudió la ministra.

Este cómputo no incluye las de Madrid. Por otra parte, asociaciones de consumidores como Facua también recogen protestas, pero son quejas que las autonomías aún no han registrado como formales.

El debate sobre las denuncias provocó tensión entre la portavoz del PP María Carmen Riolobos y la ministra. La senadora criticó que Pajín alentara a los consumidores a ser 'acusicas'. En su réplica, esta negó haber actuado así e instó a Riolobos a demostrarlo. Cuando la senadora del PP recuperó la palabra, elevó el tono de voz y exigió a Pajín que retirara del acta de la sesión sus palabras. La semana pasada, en una entrevista radiofónica, al ser preguntada sobre cómo denunciar, Pajín detalló el trámite. Sus palabras se sacaron de contexto, denunció su gabinete.