El político Juan Mari Bandrés, uno de los fundadores de Euskadiko Ezkerra, ha muerto este viernes a los 79 años. Bandrés, que llegó a ocupar escaños en el Senado y en el Congreso, es una figura histórica en el País Vasco.

En 1997 sufrió un derrame cerebral

Nacido en San Sebastián en febrero de 1932, Bandrés fue fundador y único presidente de Euskadiko Ezkerra, diputado, senador, parlamentario vasco y eurodiputado, además de miembro del Consejo General Vasco, el gobierno preautonómico.

Abogado de miembros de ETA durante la dictadura franquista, fue uno de los letrados defensores en el Proceso de Burgos, en 1982 fue el encargado de negociar con el Gobierno de la UCD la disolución de ETA político-militar, lo que le valió ser amenazado por ETA militar.

Su trayectoria en la defensa de los derechos humanos le valió numerosos reconocimientos, como el premio Olof Palme, la Cruz de Honor de San Raimundo de Peñafort o la Gran Cruz de la Solidaridad.

'Ojalá se haya ido sabiendo que ETA ha dejado las armas'

Bandrés, que se dio de baja del PSE-EE en 1994, dos años después de conducir a Euskadiko Ezkerra a la integración con el PSE, sufrió un derrame cerebral en octubre de 1997, por el que fue intervenido en Madrid y tuvo una larga estancia en el hospital guipuzcoano especializado en daño cerebral Aita Menni.

El lehendakari Patxi López ha lamentado a través de su cuenta de Twitter el fallecimiento de Bandrés. 'Un luchador por la libertad que, por desgracia, no ha podido disfrutar este nuevo tiempo en Euskadi por el que tanto peleó', ha señalado López.

También por Twitter, el líder de la formación Equo, Juan López de Uralde, ha trasladado sus condolencias a la familia de Bandrés, de quien ha dicho que era 'un hombre bueno y comprometido'.

'Era un demócrata con mayúsculas', dice José Blanco

Desde el PSOE, la coordinadora del comité electoral de los socialistas, Elena Valenciano, ha mostrado su solidaridad con la familia del histórico político en una entrevista concedida a Radio Nacional de España. 'Espero que haya tenido tiempo y haya podido comprender que ETA ha dejado las armas definitivamente. Ojalá se haya ido sabiéndolo'.

El presidente del Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra, es otro de los que se ha sumado a las muestras de dolor por su muerte. En un comunicado, Ibarra destaca que la muerte de este abogado defensor de los derechos humanos ha llenado de conmoción a la asociación. Recuerda además que no sólo fue un amigo, sino un compañero que hizo posible la existencia de esta organización en el momento de su nacimiento. Ibarra afirma que sin su ayuda y colaboración no se hubiera podido iniciar la labor a favor de los colectivos vulnerables, ni la defensa frente al racismo y la intolerancia.

La líder de UPyD, Rosa Díez, se ha referido a Bandrés como una persona 'extraordinaria' que 'aportó mucho a la política en España en un momento complicado y delicado'. 'Era un gran político, lo reconoce cualquiera', ha subrayado Díez.

El Gobierno ha decidido distinguir la labor política de Juan Mari Bandrés al concederle la Gran Cruz de Isabel la Católica, tal y como ha anunciado el ministro Portavoz y de Fomento, José Blanco, tras la reunión del Consejo de Ministros.

Blanco ha trasladado las condolencias del Ejecutivo a la familia de Bandrés, de quien ha ensalzado 'su legado como legislador y representante político de los vascos'. 'Era un demócrata con mayúsculas, un luchador por la libertad, un hombre muy querido, un hombre de principios sólidos, unos principios necesarios para crear un nuevo tiempo en el País Vasco'.