Los primeros pasajeros del crucero Concordia que han regresado a España han anunciado su intención de presentar una denuncia conjunta contra la compañía por su responsabilidad en el hundimiento del barco.

Las 50 personas que han aterrizado en el Aeropuerto de El Prat (Barcelona), procedentes de Roma en un vuelo de Alitalia, se han reunido de forma improvisada y han comenzado a confeccionar una lista de afectados, recopilando nombres, DNIs y teléfonos.

En declaraciones a los medios que les esperaban a su llegada a Barcelona, han criticado que la evacuación del barco fue 'muy lenta' y que algunos de ellos tuvieron que tirarse al agua para salvar la vida al ver que la embarcación se volcaba.

Una de las afectadas, Purificación Balbás, que ha relatado cómo ella y su marido subieron en el penúltimo bote salvavidas y que cuando pudieron salir, el barco estaba bastante hundido, ha explicado que 'primero les dijeron que era un fallo técnico de los generadores, y luego fueron improvisando sobre la marcha, ya que la tripulación estaba también asustada'. 'Hubo mucha descoordinación y miedo, había gente en silla de ruedas y con bebés', ha detallado.

Otro de los damnificados es José Peña, que viajaba con un grupo de quince amigos y ha contado que se tuvo que tirar al agua 'después de estar una hora y media en una sala' de la que no se podían mover, tras lo que se lanzaron 'porque estaba a punto de hundirse y cada uno se fue por su lado', aunque esta mañana se han reencontrado.

'Si hubo una negligencia, alguien tiene que cargar con su culpa', ha afirmado María José Blanco, una de las afectadas que ha agradecido la respuesta de los habitantes de la isla italiana en la que fueron acogidos en primera instancia donde les atendieron 'como pudieron, con mantas, comida, también abrieron la iglesia'.