Dimisión inmediata, disolución de Les Corts y convocatoria de elecciones anticipadas. Es lo que exigió ayer a Francisco Camps el líder de los socialistas valencianos, Jorge Alarte, que convocó un rueda de prensa urgente tras la decisión del Tribunal Supremo de reabrir la causa de los trajes. Alarte, que estuvo acompañado por su portavoz parlamentario Ángel Luna, denunció que el territorio valenciano 'vive una gravísima crisis de legitimidad institucional que exige la salida de la vida pública de Camps'.

El secretario general del PSPV-PSOE explicó que cada vez existen más evidencias de la presencia de la Gürtel en las instituciones valencianas. Entre ellas, señaló la implicación de la trama en la visita del Papa, los informes judiciales que acentúan las irregularidades de la financiación del PP y las millonarias adjudicaciones a firmas de Correa. '¿Va a hacer falta que sean 100.000 y no 50.000 los folios y vergüenzas que conozcamos en el proceso que instruye [Antonio] Pedreira en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid?', se preguntó Alarte.

Por su parte, Mònica Oltra, portavoz adjunta del grupo Compromís, tildó a Camps 'de cadáver político que, si no retiran pronto, empezará a desprender muy mal olor'. Oltra destacó que la única solución digna para el jefe del Consell 'es la dimisión', ya que podría convertirse en el primer presidente de la Generalitat que se sienta en el banquillo de los acusados. 'La ciudadanía no merece este espectáculo por mucha mayoría absoluta que tengan detrás', apostilló.

En la misma línea se pronunció la diputada de Esquerra Unida del País Valencià (IU), Marga Sanz, quien aseguró en una nota que Camps debe dimitir antes del juicio 'y comparecer como ciudadano particular, no con el cargo de presidente del Consell'. Sanz instó a la ciudadanía 'a sumarse a cuantas movilizaciones se produzcan para exigir la depuración de responsabilidades en el gobierno Valenciano'. IU ha convocado hoy, a las 20 horas, concentraciones en Valencia, Alicante y Castellón.