Otra reunión más del pleno del Tribunal Constitucional para estudiar el enésimo borrador de la sentencia sobre el Estatut de Catalunya, esta vez elaborado por la presidenta del órgano, María Emilia Casas, y otra reunión en blanco.

Previsible o no, los magistrados han agotado el pleno sin lograr acuerdo alguno para dictar una sentencia definitiva, después de casi cuatro horas de reunión. En ese tiempo, los miembros del Tribunal ni siquiera han votado el nuevo borrador de Casas. 

De momento se desconoce si los magistrados han decidido convocar un nuevo pleno para los próximos días, aunque sí se sabe que durante este jueves no volverán a reunirse. Tampoco se sabe detalle alguno sobre el debate mantenido ni los resultados del mismo.  

Lo que sí ha trascendido es que los magistrados estarían dispuestos a votar artículo a artículo el borrador de la sentencia, tratando de sortear de este modo el bloqueo provocado por la polarización de los distintos sectores. 

La posibilidad de votar cada precepto está regulado por el artículo 254 de la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ), que establece que 'la votación, a juicio del presidente, podrá tener lugar separadamente sobre los distintos pronunciamientos'. Este artículo señala además que 'empezada la votación, no podrá interrumirse sino en caso de fuerza mayor'.

Con este nuevo día en blanco, los magistrados dilatan aún más el proceso de decisión sobre el Estatut, que ya dura tres años y medio y numerosos fracasos. 

El pleno de este jueves se ha celebrado a pesar de estar aún pendiente la resolución de los recursos de súplica presentados tanto por el Gobierno catalán como por el Parlament de Catalunya contra la negativa del Tribunal a declararse incompetente para dictar sentencia sobre el asunto. 

El borrador de Casas no modifica sustancialmente el presentado por Elisa Pérez Vera hace unos meses y que fue rechazado por seis votos a cuatro. Este texto podría incluir la declaración de inconstitucionalidad de unos 15 preceptos, mientras que otra veintena podrían ser sometidos a interpretación. La presidenta del Tribunal deberá sortear los mismos escollos que tuvo que afrontar el de Pérez Vera, referentes a la definición de Catalunya como nación, al capítulo de los símbolos nacionales, a la primacía de la lengua catalana, a la bilateralidad en las relaciones entre Generalitat y Estado y a la creación de un Poder Judicial catalán.

Casas se hizo cargo de la ponencia el pasado 19 de mayo después de que Guillermo Jiménez, anterior ponente y magistrado del llamado 'bloque conservador', retirara su texto antes de que fuera sometido a votación. Jiménez, por su parte, tomó la ponencia tras el rechazo al texto de Pérez Vera, el pasado 16 de abril.