El fallecimiento ayer del dibujante, humorista gráfico, escritor y académico español Antonio Mingote, ha generado una oleada de reacciones de pesar y de reconocimiento a un 'maestro', a un 'trabajador incansable' y a 'una de las figuras más importantes' de la cultura española. La capilla ardiente del dibujante quedó abierta ayer a las 19:00 horas en los Jardines de Cecilio Rodríguez, en el madrileño Parque del Retiro, lugar al que ya han acudido personalidades del mundo de la cultura y la política.

Junto al féretro se cuentan varias coronas, entre ellas una enviada por los Reyes de España y otra por los Príncipes de Asturias, además de una foto de Mingote, sobre un caballete, en la que aparece con una pluma en la mano.

'Fue el gran cronista de la historia cotidiana y social de España, fue un gran español', dijo ayer el director del Instituto Cervantes, Víctor García de la Concha, antes de entrar a despedirse del ilustrador. Su compañero y también humorista gráfico Antonio Fraguas 'Forges' ha recordado hoy con cariño al fallecido 'como un amigo, un compañero, un guía, una persona excepcional'.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, describió a Mingote como 'una de las figuras más importantes en el periodismo y en la cultura española del último medio siglo'. Un 'maestro' que diariamente regaló 'una mirada aguda y original' de España, añadió. Además, la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha anunciado esta mañana que propondrá en el próximo pleno municipal que Antonio Mingote 'tenga una calle con su nombre en la capital de España por su trayectoria humana y profesional, y rendirle así tributo por el cariño que le profesan todos los madrileños'.

La capilla, a la que se puede acceder por grupos limitados, permanecerá abierta hoy hasta 19:00 horas, para después celebrarse la incineración de los restos de Mingote en la más estricta intimidad.