Tanto en el PSOE como en el PP tocó mirar al futuro, lanzar el mensaje a los militantes más jóvenes. De ello se encargaron el vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, desde las filas socialistas, y el vicesecretario de comunicación de los conservadores, Esteban González Pons.

Pese a que Rubalcaba se marcó como objetivo en su intervención inicial no criticar al partido presidido por Mariano Rajoy 'no me voy a meter con el PP', proclamó, no lo consiguió. Quizá porque tras los últimos cambios en el Gobierno emprendidos por José Luis Rodríguez Zapatero, los socialistas han recuperado el oxígeno suficiente como para denunciar que pese a que el líder del PP no ayude, ni arrime el hombro, ellos se sienten capacitados para sacar a España de la crisis.

'Tenemos que decirles a los ciudadanos que solos también podemos. Y no es la primera vez que ocurre. No es la primera vez que un Gobierno socialista se enfrenta a la crisis solo', señaló el hombre fuerte del Gobierno desde la sede nacional del partido en Madrid. Unas palabras que supo equilibrar con una llamada a evitar la euforia: 'Ellos [en alusión al PP] sólo ganan si nosotros desistimos. Así que aplicaos el cuento', exigió en la clausura del VII Foro Institucional de las Juventudes Socialistas.

Para Rubalcaba, la 'palabra mágica' para salir de la crisis es la confianza. Por ello, encomendó a su auditorio a que transmitiese este valor a la ciudadanía.

'Lo que a España le va bien, a Rajoy la va fatal', sostiene el vicepresidente

Tras resumir la actitud del PP en la siguiente frase: '¿Para qué os voy a ayudar [a los socialistas] si nos va bien esperando?' y considerar que sería más constructivo que los conservadores actuasen como lo ha hecho la oposición en Portugal, que ha respaldado algunas actuaciones del Gobierno, Rubalcaba pasó a debatir sobre si, a su juicio, Rajoy tiene una 'agenda secreta'.

La actitud del PP de los últimos meses ha estado marcada por la indefinición. Rajoy ha realizado varias propuestas sobre lo que él haría en el supuesto de llegar a la Moncloa, pero sin detallarlas demasiado a fin de evitar un desgaste que los conservadores creen 'innecesario' cuando queda más de un año para las generales.

'¿Saben [en el PP] lo que hacer y lo ocultan o no saben lo que hacer?', se preguntó el titular de Interior, para después responderse a sí mismo. Rubalcaba se mostró convencido de que 'hay cosas' que el partido presidido por Rajoy 'no sabría arreglar'. Y que hay otras 'que saben perfectamente pero no lo van a decir'. '¿Alguien imagina que un partido que ha gobernado durante ocho años y que gobierna en Madrid y en Valencia no tiene planteado nada en relación con la economía del país? Claro, pero no lo dicen porque saben que pierden votos', añadió.

En este sentido, insistió en que el PP espera inactivo a ver si ve pasar 'el cadáver de su enemigo'. 'Lo que a España le va bien a Rajoy la va fatal', resumió el vicepresidente primero del Gobierno.

A la hora de concretar detalles sobre el 'programa oculto' del PP, Rubalcaba no quiso ir muy lejos. Dijo que basta con echar un vistazo a lo que se pone en práctica en las comunidades en las que gobiernan. Por ejemplo, a la sanidad en la Comunidad. 'Está hecha unos zorros', consideró.

Rajoy reúne hoy a la cúpula de su partido para perfilar su discurso

También se refirió el ministro del Interior al último enfrentamiento entre Gobierno y oposición a cuenta de la reforma de la ley del Registro Civil que acaba con la primacía del apellido paterno, una iniciativa tras la que el PP ve 'una cortina de humo' ante la que está dispuesto a 'dar la batalla'.

Rubalcaba tachó de 'patética' la forma en la que los conservadores esconden su actitud ante la igualdad. 'Cada vez que el Gobierno da un paso en favor de la igualdad de las mujeres, el PP siempre encuentra una razón para no darlo: que si no es buen momento, que ya veremos, que la sociedad está preparada, que la tradición...', recalcó. A su entender, 'en vez de inventarse campañas' para defender a las mujeres, lo que tiene que hacer el partido presidido por Mariano Rajoy es 'decir que el Gobierno tiene razón' en los avances. Sólo así, consideró, 'la gente verá que se preocupan por la igualdad'.

Por su parte, el vicesecretario general del PSOE, José Blanco, consideró que su partido 'ha iniciado la remontada' y que el PP 'va a jugar sucio' en las próximas elecciones municipales de 2011.

En un acto de confraternización ante 600 simpatizantes socialistas celebrado en Oroso (A Coruña), Blanco insistió en que la 'primera estación' de esa remontada 'es mayo' y 'la siguiente es 2012', informa Europa Press. Durante su intervención, cargó en diversas ocasiones contra Rajoy, a quien recriminó 'poner palos en las ruedas para que las dificultades fuesen mayores' en tiempos de crisis.

Blanco advierte de que el PP usará el 'juego sucio' en las elecciones de 2011

En la misma línea del discurso del vicepresidente primero, el vicesecretario general de los socialistas consideró que los conservadores no pueden construir un proyecto político ni ser alternativa 'estando con los brazos cruzados'.

Junto a esto, censuró que el PP siga el modelo de David Cameron en Reino Unido pues, a su juicio, en 'la agenda oculta del PP están recortes que obedecen a lo que piensan', ya que 'no creen en la igualdad'.

En concreto, el titular de Fomento criticó las políticas llevadas a cabo por el actual presidente del PP durante sus etapas pasadas en cargos gubernamentales. Blanco aseguró que Rajoy puso en práctica 'la congelación' de sueldos de funcionarios que 'equivalen al recorte de ahora', abogó por la disminución de becas o dijo que'había unos hilillos', en alusión a las toneladas de fuel que vertía al mar el Prestige.

Rubalcaba ve en la sanidad madrileña el modelo del PP: 'Está hecha unos zorros'

En este contexto de denuncia permanente de los socialistas a propósito de la reticencia a desvelar su programa, el líder del PP ha convocado hoy en Madrid al comité ejecutivo nacional de su partido. Fuentes de la dirección nacional aseguraron que el presidente de los conservadores va a volver a pedir a los suyos que no caigan en el error de hacer caso a la 'tesis socialista' de que la formación carece de una alternativa. Ya lo hizo hace un par de semanas en un acto de partido en Madrid.

Además de perfilar el discurso de cara a los próximos meses, Rajoy tiene todavía sobre la mesa el asunto pendiente de designar un cabeza de lista para las autonómicas en el Principado de Asturias. La formación regional está dividida entre los partidarios del ex ministro de Fomento de Aznar, Francisco Álvarez-Cascos, y quienes apoyan a la concejala oventense Isabel Pérez Espinosa.