'Habrá que ir sumando a organizaciones sociales, a asociaciones de vecinos... Porque esto nos va a afectar a todos'. Con esta frase, Soledad Fernández, de CCOO, resumió ayer la lucha que este sindicato junto con UGT emprenderá contra los presupuestos que la Generalitat valenciana ha preparado para 2012. Las primeras protestas arrancarán el lunes 21 de noviembre con concentraciones en centros educativos, estaciones de ferrocarril y hospitales, entre otros.

UGT y CCOO señalaron ayer en rueda de prensa que en los últimos dos años se han recortado partidas de gasto por valor de 2.000 millones de euros. Los dos sindicatos desgranaron algunos tijeretazos. Explicaron que a la aplicación de la Ley de Dependencia, por ejemplo, se dedicarán cinco millones de euros menos que en 2010 pese a que el número de prestaciones reconocidas es el doble. Además, habrá 30 millones menos para la renta básica de ciudadanía, 35 millones menos para los programas de atención a la discapacidad o 2,2 menos para la promoción de la mujer.

'No estamos ante una salida de la crisis, sino ante una oportunidad de negocio', criticó Luis Lozano, de UGT. Los conservadores 'quieren otro modelo', añadió, en el que la iniciativa privada penetre en los servicios públicos. Puso dos ejemplos hallados en el presupuesto. En primer lugar, en sanidad se mantiene el gasto en los centros sanitarios concertados, mientras disminuye el de los gestionados directamente por la Generalitat. En el área educativa, decrece la construcción de centros públicos mientras se autoriza la cesión de suelo público para la construcción de colegios de gestión privada.