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'El Solitario' declara como imputado por atracar un banco en Madrid

La juez le atribuye los delitos de falsificación, robo con intimidación y tenencia y depósito de armas de guerra

EFE

Jaime Giménez Arbe, El Solitario, condenado a 47 años de cárcel por el asesinato de dos guardias civiles en Navarra, y que está en prisión en Portugal por otros delitos, ha declarado ahora ante una juez de Madrid por el robo en 2007 en una sucursal bancaria del barrio madrileño de Canillas.

Así lo han confirmado a Efe fuentes jurídicas, que han explicado que la titular del Juzgado de Instrucción número 22 de Madrid, Patricia Jiménez-Alfaro, tomó declaración el pasado lunes al que es posiblemente el atracador más famoso de España.

En esta ocasión, El Solitario está imputado por los delitos de falsificación, robo con intimidación y tenencia y depósito de armas de guerra por el citado atraco, ocurrido en febrero de 2007, y en el que la Guardia Civil sospechó desde un primer momento de la implicación de Giménez Arbe.

Los agentes que seguían la pista a El Solitario desde 2004, informaron entonces de que la persona que atracó el banco intimidó a los empleados para poder llevarse el botín de la sucursal y después salió huyendo.

El Solitario ha sido entregado temporalmente a las autoridades españolas para acudir a esta citación y también para ser juzgado el pasado mes en la Audiencia Provincial de Zamora por un atraco, también en 2007, a un banco de la localidad de Toro, juicio en el que la Fiscalía ha pedido doce años y medio de prisión.

Durante esa vista El Solitario se refirió a uno de los atracos como 'expropiación bancaria' y acusó a los Gobiernos de España y Portugal de las condiciones de aislamiento en las que se encuentra en prisión desde hace cinco años y que, según él, le 'están dañando el cerebro'.

El Solitario fue detenido el 23 de julio de 2007 en la costera localidad portuguesa de Figueira da Foz después de años de investigación, ya que solía utilizar el mismo modus operandi al efectuar los atracos: actuaba solo, normalmente a última hora de la mañana, disfrazado con peluca oscura y barba postiza, y armado con una pistola o revólver.

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