Elegidos los 956 delegados con derecho a voto en el congreso, varios secretarios regionales siguen aferrados a su neutralidad. El secretario general del PSM, Tomás Gómez, se mueve en estas aguas y ayer puso sobre la mesa un elemento más para su decisión y la de muchos delegados, que tiene que ver con los equipos. Estos, dijo, 'son esenciales'. Por eso, anunció que pedirá a los candidatos que 'empiecen a desvelar un poco de qué equipos van a rodearse en caso de que obtengan la victoria en el Congreso'.

Una forma de no pronunciarse sobre su favorito. De la reunión de ayer en el PSOE de Andalucía tampoco se obtuvo conclusión alguna sobre la posición del líder José Antonio Griñán. 'El secretario general escuchará a los delegados y los secretarios provinciales y se posicionará cuando llegue el momento', sostuvo la número dos, Susana Díaz, en una rueda de prensa en la que esquivó esa pregunta en varias ocasiones. Griñán puede apoyar a Chacón, a Rubalcaba, o escurrir el bulto y no pronunciarse por ninguno de los dos, informa Raúl Bocanegra. En Galicia, el secretario general del PSdeG, Patxi Vázquez, se mantuvo en la indefinición. Aunque ha escuchado a los dos precandidatos, aún es tiempo de reflexionar. 'Tomará la decisión cuando proceda', dicen en su entorno.

También está en esa posición el secretario de Organización del PSOE y líder regional en Aragón, Marcelino Iglesias. Su neutralidad, dice, va con el cargo.

Iglesias hizo balance ayer de los congresillos y resaltó que está siendo 'un proceso extraordinariamente democrático'. En su opinión, del 38º Congreso saldrá un PSOE con 'un liderazgo reforzado', preparado para hacer oposición y para 'cualquier eventualidad'.