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El Tribunal de Cuentas multa a Unió por sus irregularidades

El partido de Duran deberá pagar 271.000 euros por donativos anónimos ilegales

F. CASAS / M. Á. MARFULL

Unió Democràtica de Catalunya no gana para disgustos con sus cuentas. A los casos abiertos por corrupción y supuesta financiación irregular del partido democristiano que preside el portavoz de CiU en Madrid, Josep Antoni Duran, i Lleida ayer se sumó una multa del Tribunal de Cuentas.

Los socios de Artur Mas fueron sancionados por el ente censor de cuentas con una multa de 271.797 euros. El motivo del expediente es que en 2006 recibió un donativo anónimo ilegal de 196.000 euros. Hasta 2007, la ley permitía a los partidos recibir hasta 60.000 sin consignar donante. Unió triplicó la cantidad y se la sanciona por un importe que duplica lo que aceptó 'ilegalmente'.

La fiscalía estudia hace semanas una trama financiera ilegal de UDC

El informe de fiscalización de 2006, realizado en base a la documentación aportada por los propios partidos, deja en mal lugar a Unió. Según el Tribunal, la presentada por UDC 'no reúne los requisitos mínimos para considerarse satisfactoria' y señala varias incoherencias contables.

En relación al donativo anónimo recibido que triplicaba lo establecido por ley, la formación democristiana indicó que correspondía a 'cuatro donativos procedentes de la recaudación efectuada por los responsables de las organizaciones intercomarcales'.

Pero el Tribunal no considera 'suficientemente acreditado el fraccionamiento del ingreso único registrado a caja a nivel de efectos contables'.

El Tripartito hurga en la herida de los socios de Mas, con varios casos abiertos

Unió tiene una relación tan intensa como provechosa para sus arcas con los donativos anónimos. En sus años en el Govern, llegó incluso a superar lo que recibían partidos infinitamente más grandes, como el PSOE o el PP. El socio pequeño de la federación nacionalista recibió de forma 'opaca' 2,6 millones en 2003, el último año de Jordi Pujol en la Generalitat. En 2004, la cifra bajó a 884.000 euros. En 2006, los donativos anónimos fueron de 260.000 euros incluidos los 196.000 ahora objeto de sanción.

En 2007, el Congreso modificó a instancias de ERC la Ley de Financiación de los Partidos. Suprimió los donativos ilegales, decisión que Duran tildó de 'inconstitucional'. La reforma obligó a Unió de cambiar su estrategia. Como afectaba a los partidos y no a sus fundaciones, la Fundació Coll i Alentorn vio multiplicadas por 40 sus donativos anónimos. De 30.000 euros, se pasó a 1,2 millones.

Unió guardó ayer silencio ante la multa del Tribunal de Cuentas pero los integrantes del Tripartito hurgaron en ella pidiendo tanto a Duran como a Mas explicaciones. El PSC los instó a 'dar la cara sin esperar un minuto más'.

Anteayer, se supo que el teniente fiscal del Tribunal Supremo va tras los pasos del dos de Duran en Madrid, Josep Sánchez Llibre, por su supuesto papel central en una amplia trama de financiación ilegal del partido, que ya ha motivado peticiones de comparecencia en el Parlament. Y el caso Pallerols, un asunto de corrupción que habría servido para financiar el partido y lucrar a algunos de sus dirigentes, está a punto de llegar a juicio.

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