Este artículo se publicó hace 12 años.
Se agotan las posibilidades para un pacto de Gobierno en Grecia
Después de que el Pasok falle en su búsqueda alianzas, el presidente Papulias se reunirá con todos los partidos para tratar de forzar un pacto. Si no, habrá elecciones
La total división de los partidos griegos sobre los planes de austeridad dictados por la Troika sigue haciendo inviable la conformación de una alianza con los apoyos necesarios para gobernar el país. Después de que en esta tarea fracasaran los conservadores de ND y la izquierda radical de Syriza, llegó el turno a los socialdemócratas del Pasok. Como era de esperar, tampoco lo han conseguido.
Evangelos Venizelos, líder del Pasok, anunció hoy su derrota. "He venido a devolverle el mandato para formar Gobierno", comunicó al presidente del país, Carolos Papulias, al que pidió que centre ahora sus esfuerzos en lograr que Syriza se avenga a participar en un Ejecutivo de coalición.
El principal escollo hasta la fecha para formar un Gobierno, ha sido el rechazo de Syriza a aliarse con Nueva Democracia y el Pasok, los únicos partidos que han apoyado el acuerdo con la UE que obliga a Grecia a duras políticas de ahorro a cambio de ayuda financiera.
Ante esta situación, la última posibilidad de llegar a un acuerdo antes de que repitan las elecciones es que Papulias consiga poner de acuerdo a los partidos. Para ello, iniciará mañana sus reuniones con los partidos parlamentarios para sondear las opciones de formar un Gobierno de unidad nacional.
Tras un encuentro conjunto con los tres principales partidos, Papulias recibirá sucesivamente y por separado a los dirigentes de las otras fuerzas, los nacionalistas de Griegos Independientes, los comunistas del KKE, la formación neonazi Amanecer Dorado y el centro-izquierda de Izquierda Democrática. Si la ronda de contactos, que podría continuar el lunes, no da resultado, Papulias tendría que convocar nuevas elecciones, que se celebrarían seguramente el 10 o el 17 de junio.
Alemania continúa amenazandoMientras el juego de alianzas dirá si Grecia continúa bajo los dictados de austeridad de la UE o abre una nueva vía política en la gestión política de la crisis, Alemania trata de mover ficha. Así, el ministro de Exteriores, Guido Westerwelle, ha advertido de que las ayudas de la UE podrían quedar en suspenso en el caso de que ese país suspenda el proceso de reformas e incumpla los compromisos adquiridos. Es decir, si gana una coalición de izquierdas.
En declaraciones que publica hoy el rotativo Die Welt, comenta que "deseamos que Grecia lo consiga. Es por eso que ayudamos. Pero los griegos deben a cambio cumplir con sus compromisos de reformas". Sin embargo, ha mostrado confianza en que los partidos proeuropeos lleguen finalmente a un acuerdo de coalición en Atenas.
En parecidos términos se expresan otro destacados políticos alemanes como el líder del grupo parlamentario cristianodemócrata (CDU), Volker Kauder, quien advierte igualmente de que "la condiciones para seguir ayudando son claras y no negociables" en una entrevista con el semanario Focus.
En la misma revista, el presidente de la Confederación de la Banca Alemana, Andreas Schmitz, se muestra, sin embargo, contrario a que Grecia abandone la Eurozona como exigen algunos políticos si Atenas no resuelve su actual crisis institucional. Aunque "Grecia constituye un caso excepcional", su salida del euro traería consigo el peligro de que los inversores teman el contagio a otros países y hagan subir de forma desmedida los intereses para los créditos.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.