El barco español de la Flotilla ya puede navegar libremente

El Gernika ya puede navegar libremente por el Mediterráneo. Después de varios días bloqueado por las autoridades griegas en el puerto cretense de Kolimpary, el barco español participante en la Segunda Flotilla de la Libertad es libre ya para regresar a España. Así lo ha anunciado hoy desde la embarcación Manuel Tapial, coordinador de Rumbo a Gaza, quien ha asegurado que vuelven con un "triunfo importante".

"El oficial de la actividad portuaria, con el que hemos tenido que hablar durante todos estos días, nos ha comunicado que no habrá ningún problema para que podamos salir de Grecia", ha declarado Tapial, que ha destacado el "éxito de la estrategia" que han escogido al ocupar desde el martes pasado la embajada española en Atenas y, en especial, después de que ayer cuatro de los activistas que se encontraban en su interior iniciasen una huelga de hambre. "La huelga fue fundamental, que el Gernika esté libre es el fruto de su acción", ha señalado el coordinador de Rumbo a Gaza tras anunciar que los ocupantes de la embajada —a excepción de Nacho Prieto, que viajará en el barco— llegarán mañana a las 12.00 horas al aeropuerto de Barajas, en Madrid.

Manuel Espinar, coordinador de la iniciativa en España, ha afirmado que en cuanto el barco "regrese a las costas españolas, habrá terminado la primera misión de una guerra muy larga". Además, ha anunciado que el Gernika se convertirá en un "símbolo de lucha por la paz, sobre todo en el Mediterráneo". Espinar ha resumido el fin de la misión como un "cambio de foto final". "En lugar de terminar con un bloqueo por parte de Israel o incluso con arrestos como esperábamos, finalizó en lo que yo llamo la operación Jaula", ha comentado.

Las impresiones de los activistas españoles son, a pesar de no haber podido alcanzar Gaza, positivas. Para Santiago González, portavoz de Rumbo a Gaza, se ha conseguido uno de los objetivos marcados desde el principio: "desenmascarar a la comunidad internacional". En su opinión, el hecho de que las autoridades españolas y griegas no hayan dejado de insistir en que hay que usar los cauces autorizados para transportar la ayuda humanitaria demuestra que se "supeditan a Israel, ya que están pendientes de su arbitrariedad".

González ha denunciado además que el Ministerio de Asuntos Exteriores incidiese siempre en la "tensión" que provocaría una Flotilla, cuando la verdadera "tensión la provoca Israel ocupando Palestina". "¿Cómo se puede permitir que un Estado practique el apartheid?", se ha preguntado Espinar, quien además ha resaltado que, en el momento en que España u otro país habla de llevar ayuda humanitaria a Gaza ya están reconociendo la existencia de un problema.

"¿Cómo se puede permitir que un Estado practique el apartheid?"

En la misma línea se sitúa Joan Calvera, activista que estuvo en Grecia durante los primeros días. Según ha comentado, aunque no hayan podido navegar rumbo a Gaza, "se le ha dado mucha publicidad a lo que ocurre en Palestina y se ha fomentado la solidaridad hacia los que intentamos romper el bloqueo".

Si bien el objetivo a corto plazo es traer de vuelta el Gernika, Tapial ha advertido que si Israel no retira el bloqueo a la franja, volverán. "El pueblo de Gaza no está solo", ha destacado. El activista ha manifestado que la vuelta se alargará de 12 a 20 días, puesto que "aún hay mucho que hacer". "Tenemos muchas ideas para el barco", que él ve como un "defensor de los derechos humanos".

La ayuda humanitaria que pretendía trasladar la Segunda Flotilla de la Libertad permanece almacenada todavía en el puerto del Pireo, en Atenas. En principio, Grecia mantiene su oferta de encargarse de que llegue a Gaza, aunque lo harían a través de los "cauces autorizados", algo que rechazan los activistas. "Sí aceptamos su oferta siempre y cuando la ayuda —la española está valorada en 600.000 euros— se traslade por mar desde Grecia. No será entregada por otras vías", ha garantizado Tapial.