Público
Público

La brecha entre el Norte y el Sur anima el debate en el Congreso de la Izquierda Europea

Los países de la Europa considerada rica no comparten la idea de la deuda ilegítima. Empieza a sonar con fuerza la posibilidad de que en el futuro haya una presidencia compartida por un hombre y una mujer

DANIEL DEL PINO

No importa si las fuerzas que debaten pertenecen a la izquierda alternativa. La brecha abierta por la crisis entre el Norte y el Sur de Europa se está dejando notar más de lo que podía estar previsto en el IV Congreso del Partido de la Izquierda Europea. Tal y como reconocía esta mañana la vicepresidenta, Maite Mola, la deuda y, en concreto la consideración como ilegítima de parte de ella, es uno de los motivos que están encendiendo un debate que parecía pactado antes de este cónclave.

Básicamente, porque para los países del Norte es complicado entender lo que está suponiendo para España, Grecia o Portugal el peso de la deuda generada por los intereses de la prima de riesgo. 'Ellos lo enfocan más a la solidaridad y a la ayuda', mientras que los países del sur están tratando de hacer ver la necesidad de una auditoría de la deuda que establezca qué parte es legítima, porque se ha generado por el estado social, y cuál es ilegítima, es decir, la que ha sido provocado por los privados. En el caso concreto de España, por ejemplo, con el rescate bancario. El debate sigue abierto y de hecho el PIE ya se ha emplazado a celebrar una conferencia sobre el tema el próximo mes de marzo.

'A diferencia de ayer, que parecía que todo estaba tranquilo porque eran cosas que venían pactadas de antemano, el Congreso se está animando y se están empezando a generar debates políticos importantes. El borrador del documento que tragimos está siendo considerado insuficiente por muchas delegaciones y prueba de ello es que hasta el momento hay 31 resoluciones que tratan temas que no estaban incluidos ahí. Esto es muy positivo y puede indicar que mañana, cuando termine, sadremos mucho más reoforzados', dijo Mola.

Esa brecha Norte-Sur también quedó patente ayer durante la asamblea de la Red de mujeres del PIE (El-Fem). El miércoles, Sara Porras y Cristina Simó, explicaron a Público que el objetivo de dicha Asamblea era remarcar que la crisis está afectando de forma distinta a las mujeres del Sur y tratar de poner en marcha una nueva organización que ponga la cuestión de género en el centro del debate del PIE. Sin embargo, no hubo acuerdo, y pese a que la resolución será votada por las delegaciones, hasta ahora la mayoría de las mujeres prefiere que El-Fem siga teniendo una entidad propia, en paralelo al PIE.

La estructura organizativa del PIE también está siendo puesta en cuestión pese a que en un primer momento parecía que todo estaba muy claro. La actual dirección, encabezada por el comunista francés, Pierre Laurent, será renovada mañana casi con toda seguridad. Aunque la insistencia de algunos partidos ha forzado a abrir un debate más amplio que, si bien por el momento se ha visto aplazado, podría dar lugar a la creación de una doble presidencia. 

El Parti de Gauche (PG) de Jean-Luc Melénchon presentó una oposición directa desde el primer momento a la reelección de Laurent por haber pactado con el Partido Socialista presentarse en la misma lista a las elecciones municipales de París. Laurent, que a su vez es presidente del Partido Comunista de Francia, y Melénchon, forman - en compañía de Gauche Unitaire y la recién nacida Ensemble - el Front de Gauche, una de las coaliciones de izquierdas referentes en Europa. 

Si bien es cierto que los comunistas tradicionalmente han pactado con los socialistas en las elecciones locales para conseguir estar presentes en las instituciones, la decisión de Laurent es imposible de aceptar por el PG (de ahí la ausencia de Melénchon en el Congreso). Y el razonamiento no debería considerarse descabellado: si quiere hacerse creíble ese discurso contrario a la socialdemocracia que mantiene, no sólo el PIE, sino el propio Laurent, parece extraño ese pacto a nivel nacional.

Si bien parece imposible que a menos de 24 horas del final del Congreso la candidatura de Laurent fracase, lo que sí puede tomar cuerpo es la opción de una presidencia compartida, posibilidad también planteada por el PG cuando vio que la mayoría de las formaciones del PIE, que son comunistas, seguían apoyando a Laurent.

Según confirmaron fuentes del PG a Público, la delegación ha estado reuniéndose con otros partidos de manera bilateral durante las últimas horas y de esas reunioines ha surgido una corriente que no ve con malos ojos la posibilidad de una bicefalia al frente del PIE. Eso sí, la hipotética segunda cabeza visible del PIE tendría que ser una mujer (porque todo el organigrama, hasta la presidencia, es paritario en el PG)

Mola, esta mañana, aseguró que los estatutos no lo contemplaban y que por eso había que dar más tiempo a cada formación.Por la tarde, Laurent, en una intervención ante el Pleno, confirmó que la posibilidad existía y que 'queda abierta, aunque queremos dar más tiempo'.

Los italianos de Rifondazione Communista también entraron en escena esta tarde solicitando un puesto en la presidencia compartida (formada por un presidente y cuatro vicepresidentes). Fabio Amato, el líder de la delegación, expuso al máximo organismo del PIE que esa posición podría darles la visibilidad necesaria en Italia después de haberse quedado fuera del Parlamento en las elecciones de febrero, a las que acudieron con el fiscal Antonio Ingroia.

Amato explicó a este diario que la Presidencia le trasladó que no podía ser porque eso 'rompería la paridad' en las vicepresidencias.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias de Internacional