Las fuerzas especiales de Estados Unidos llevaron a cabo una operación en Somalia para rescatar a una estadounidense y un danés tras un tiroteo con los piratas que los mantenían secuestrados, una incursión poco habitual para liberar a rehenes en el Cuerno de África.

Los cooperantes, la estadounidense Jessica Buchanan y el danés Poul Hagen Thisted, habían sido secuestrados en octubre en el pueblo de Galkayo (en la región de Galmudug) cuando trabajaban para Danish Demining Group (DDG). 'Es otro mensaje al mundo de que EEUU resistirán con firmeza cualquier amenaza a nuestro pueblo', dijo el presidente estadounidense, Barack Obama, en un comunicado.

Una decena de helicópteros militares trasportaron a las tropas de élite a una zona cercana a Haradheere, en el centro de Somalia, donde se ubica una importante base pirata. 'Los nueve secuestradores murieron durante el asalto', aseguró el Mando estadounidense para África con sede en Alemania.

Leon Panetta, secretario de Defensa, confirmó que no hubo bajas norteamericanas en la operación, considerada excepcional, pues habitualmente no se atacan las bases piratas sino que se efectúan rescates en alta mar. El Consejo de Refugiados daneses informó de que los liberados están en un lugar seguro.

El deterioro de la salud de la estadounidense que según sus algunos de sus allegados podría sufrir una infección renal propició que el presidente de EEUU, Barack Obama, diese luz verde a la misión. Buchanan y Hagen Thisted volaron posteriormente a la vecina Yibuti, sede de la única base militar norteamericana en África.