El Tribunal Superior de Bogotá ha obligado al candidato presidencial Rodolfo Hernández a participar en un debate electoral con  Gustavo Petro en las 48 horas posteriores a la emisión del fallo. Hernández se negaba a participar alegando que su programa político está disponible en redes sociales como Tik Tok, Instagram, o Twitter. Ambos políticos, por lo tanto, deberán tener un cara a cara antes de este jueves 16 de junio. 

La Justicia ha explicado que "la trascendencia nacional que implica la elección del presidente de la República en nuestro Estado, el derecho de acceder a los medios de comunicación de los partidos, movimientos sociales, políticos y grupos significativos de ciudadanos, lleva implícito un deber frente al ciudadano de permitirle conocer a sus candidatos".

El encuentro debe llevarse a cabo conforme a los "principios de igualdad e imparcialidad que rigen la actividad electoral". Esta decisión judicial se produce después de que se presentaran acciones de tutela para que "se requiera a los candidatos a comparecer, organizar y planificar el o los debates, en un canal nacional televisivo o radial, se cumpla con la función de información acerca de su programa de gobierno".

En la petición también recogen que "el Consejo Nacional Electoral exhorte a los candidatos presidenciales para la presentación en los debates". Concretamente reclamaban el derecho de los ciudadanos a "recibir información veraz e imparcial y a la dignidad humana". Petro, a través de Twitter, ha celebrado la decisión de la Justicia colombiana, ya que se trata "del derecho del pueblo". El líder del Pacto Histórico, además, ha señalado que se encuentra "listo" para afrontar este cara a cara.

Hernández se excusa de no asistir al debate

Este debate ha salido adelante gracias a la presentación de cinco acciones tuteladas. Esta figura jurídica, reconocida en el artículo 86 de la Constitución colombiana, permite al ciudadano emitir una queja cuando se estén violando alguno de sus derechos fundamentales. En esta ocasión, la negativa de Hernández de celebrar un debate electoral ha ocasionado que algunas personas sintiesen que su derecho a la información estaba siendo negado.

El líder derechista, por su parte, ha alegado que la asistencia a estos debates "no es una obligación" sino "una facultad potestativa". Además, el candidato de la Liga de Gobernantes Anticorrupción se ha excusado al señalar que su programa político está disponible en Tik Tok, Instagram, o Twitter, medios que considera más "idóneos" que la celebración de un cara a cara televisivo. 

Petro, en cambio, siempre ha deseado la celebración de este tipo de encuentros, siempre y cuando se "garantice la transparencia del voto", tal como lo expresó en su cuenta el pasado 21 de marzo.