La refriega continúa. La Real Audiencia (sic), ETA y las FARC se han apropiado del debate político en Caracas, al que ayer se sumó de forma contundente la Asamblea Popular Revolucionaria. El Parlamento, controlado por el chavismo, aprobó un pronunciamiento 'de reafirmación de la soberanía nacional y de rechazo a la acusación del juez español contra Venezuela'.

'Jueces como éste dejan muy mal parado lo que puede ser la actuación de la Real Audiencia Nacional Española. (Velasco) actúa bajo las órdenes de la ultraderecha franquista', destacó el presidente de la Comisión de Política Exterior, Roy Daza. Diputados chavistas acusaron además a Hillary Clinton de estar detrás de la trama.

La teoría de la conspiración imperialista es uno de los ejes favoritos de la política de Chávez. El líder bolivariano enfatizó el miércoles que no tenía 'nada que explicar' al Gobierno español sobre estas supuestas conexiones.

Chávez, que el miércoles se encadenó (emisión obligada para todas las televisiones) durante cuatro horas y media para explicar el conflicto y para otras cuestiones internas, no ha dado respuesta a ninguno de los interrogantes puestos sobre la mesa por el juez Velasco.

Sus enemigos políticos también han movido pieza en el siempre convulso tablero político venezolano. Antonio Ledezma, alcalde mayor de Caracas, se sumó al debate transformando el famoso '¡Por qué no te callas!', en un actualizado 'Chávez, ¿por qué no hablas?' Ledezma exigió al Gobierno 'que despeje dudas y aclare que nada hay que lo vincule con el terrorismo'.

El líder de la oposición acusó a Chávez de ser amigo de la 'Internacional Terrorista', en la que destacó a ETA, las FARC, Hezbollah y a Carlos El Chacal, que cumple condena en Francia. Ledezma recordó episodios como el minuto de silencio invocado por Chávez en memoria de Raúl Reyes (líder de las FARC muerto en una acción del Ejército colombiano en Ecuador) o el monumento a Tirofijo Marulanda en el barrio 23 de enero, bastión del chavismo en Caracas.