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La Policía de Polonia retiene durante dos horas al periodista palestino Muath Hamed

El reportero, que lleva casi tres semanas en la zona cubriendo el conflicto en Ucrania para la televisión catarí Al Araby y otros medios, explica a 'Público' que estaba grabando cerca del aeropuerto de la ciudad de Rzeszow la llegada de tres baterías de misiles cuando aparecieron Policía y miembros del Servicio de Inteligencia polaco. "Fue muy raro", afirma.

El periodista palestino Muath Hamed.
El periodista palestino Muath Hamed. Cedida>

La Policía polaca y los servicios de Inteligencia del país retuvieron este miércoles durante dos horas al periodista palestino Muath Hamed y a un "asistente local" –su traductora– cerca del aeropuerto de Rzeszow, según informó el propio periodista en su cuenta de Twitter. "Registraron el auto y revisaron el carnet de identidad y el pase de prensa", escribió por la red social. Dos horas después, comunicó que ya habían sido liberados.

A través del teléfono, Hamed, que lleva casi tres semanas en la zona cubriendo el conflicto en Ucrania para la televisión catarí Al Araby y otros medios, explica a Público el incidente: "Estaba grabando cerca del aeropuerto de Rzeszow, en un párking público, en plena calle, la llegada de tres baterías de misiles Patriot. Ni siquiera estaba en una zona militar o restringida: era un lugar público. De repente llegaron dos coches de Policía y nos pidieron la documentación a mí y a mi traductora. Diez minutos después aparecieron tres coches más sin ningún distintivo. Bajaron unas personas vestidas de civiles que se identificaron como miembros del Servicio de Inteligencia de Polonia. Volvieron a pedirnos toda la documentación, registraron de arriba el coche y todo nuestro material y empezaron a hacernos toda clase de preguntas: para qué medio trabajo, de dónde soy, dónde vivo, en qué hotel me alojo, etcétera. Los agentes iban y venían, supongo que para comprobar lo que decíamos".

Hamed y la traductora estuvieron dos horas metidos en su propio coche sin saber muy bien qué ocurría a su alrededor. En ningún momento fueron trasladados a dependencias policiales. Tras dos horas y de forma tan inesperada como aparecieron, los agentes polacos les dijeron que se podían ir y seguir con su trabajo sin ningún tipo de restricción o condicionante. "Ha sido muy raro, porque nos dijeron que éramos sospechosos de espiar para Rusia ", explica este periodista palestino asentado en España. ​Hamed llegó a Polonia el pasado 19 de febrero y hasta ahora no había tenido ningún problema. Incluso ha cruzado la frontera con Ucrania para desplazarse a Leópolis.

En la ciudad de Rzeszow se encuentra la base militar polaca en la que se centraliza y desde la que sale toda la ayuda militar para Ucrania. Allí también se estacionan las tropas de refuerzo enviadas por Estados Unidos al este de Europa. Esa puede ser una explicación a la reacción de las autoridades polacas, según cuenta el propio Hamed: "Llevo aquí casi 20 días y ya había grabado antes por aquí. Tras dejarnos ir, la Policía me ha dicho que el aeropuerto civil de Rzeszow ha pasado a control militar".

Muath Hamed es un periodista palestino refugiado en España al menos durante 2021. El 11 de febrero del año pasado a las seis de la tarde, la Guardia Civil lo puso a disposición de un agente del Mossad, el temido servicio secreto israelí, que lo sometió a un interrogatorio clandestino y le amenazó, desveló Público.

El caso de Pablo González

Este caso se produce mientras el reportero español Pablo González continúa en una cárcel de Polonia. El periodista se enfrenta a 10 años de prisión y es acusado de ser un agente de la Inteligencia rusa.

"Realizó operaciones en beneficio de Rusia, beneficiándose de su condición de periodista, lo que le permitió viajar libremente por el mundo y Europa, incluyendo zonas de conflicto militar y territorios marcados por tensiones políticas", dijo el Gobierno polaco para justificar que González se encuentre en prisión. El periodista se encontraba cubriendo la crisis humanitaria derivada de la invasión rusa de Ucrania para Público, entre otros medios, cuando fue detenido el pasado 28 de febrero.

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