En seis meses, las víctimas civiles en Afganistán aumentaron un 31% con respecto al año pasado. Las cifras de militares extranjeros muertos pueden ir por el mismo camino.

En lo que va de año, han fallecido al menos 500 soldados de la ISAF según la web independiente icasualties.org.

Ese dato hace una media de 55 soldados al mes. De seguir con esta progresión, en diciembre habrían muerto 660 militares, lo que supondría un aumento de casi el 27% ya que en todo 2009 murieron 521. La peor cifra en nueve años de guerra.

En los últimos meses, las tropas de la OTAN han lanzado varios ataques contra algunos de los fortines talibanes en el sur del país. Eso puede ser una de las causas para el aumento de los fallecidos. Junio fue el peor mes desde que comenzara la invasión en 2001, con 102 muertos; el resto del verano no fue mucho mejor. En julio cayeron 88 soldados; y en agosto, 80, entre los que hay que incluir a los guardias civiles españoles víctimas del ataque de un talibán infiltrado.

El 60% de los soldados muertos en los últimos dos años son estadounidenses Sin duda, otros de los motivos del aumento de las muertes tanto por parte de los civiles, como de los soldados de la OTAN son los IED. Los talibanes han conseguido plagar las carreteras de casi todo el país con estos artefactos caseros improvisados que tanto daño hacen.

Se calcula que desde 2004, los insurgentes han colocado mas de 16.500 bombas de este tipo y han matado a mas de 7.000 personas, de acuerdo con los datos revelados por Wikileaks a finales del mes de julio.

Mientras EEUU ha aumentado considerablemente el número de efectivos desplegados en todo el país, sus soldados son también los más expuestos a los ataques talibanes.

Según los últimos datos oficiales, un total de 2.068 militares han muerto en Afganistán en todos estos años. Lo más preocupante es que el 60% de los que cayeron en los dos últimos años eran de EEUU.