ALEPO.— La tregua para la evacuación de Alepo ha saltado por los aires. A las 4 de la mañana, hora española, iba a empezar, según el acuerdo fraguado entre Turquía y Rusia, el traslado de los miles de civiles y al menos 1.500 combatientes del sureste de la ciudad de Alepo, en Siria. Sin embargo, apenas llegada la hora del inicio del alto el fuego, la ciudad comenzó a sufrir varias explosiones mientras se libraban, de nuevo, intensos enfrentamientos. Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, al menos seis personas han muerto y otras 30 han resultado heridas por el impacto de decenas de cohetes lanzados por facciones rebeldes e islámicas contra zonas bajo el control de las autoridades sirias.

Ante esta situación, los autobuses que iban a usarse para la evacuación se han retirado y han regresado a sus bases, según afirmó el director del Observatorio, Rami Abderrahman. La evacuación se ha paralizado y se desconoce cuando se tratará de llevar a cabo de nuevo. La organización acusa a las autoridades sirias de impedir la salida de los insurgentes y civiles de Alepo; mientras que los opositores culpan a Irán, porque quiere incluir en el acuerdo algún punto referido a los cercanos pueblos de mayoría chií de Fua y Kefraya.

La mezquita Umayyad destrozada por la guerra en Alepo, Siria. / REUTERS

El motivo, según el Observatorio, es que entre los rebeldes hay unos 250 guerrilleros extranjeros que las autoridades sirias quieren detener e investigar, y el hecho de que el Ejército considere que no recibe nada a cambio en este pacto, ya que estaba a punto de tomar totalmente el área rebelde. Hasta ahora, los medios oficiales sirios mantienen el silencio sobre este tema, aunque ni siquiera confirmaron este martes la existencia de un acuerdo para la evacuación.

El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, expresó su confianza en que la situación se resuelva "en los próximos dos o tres días", periodo en el que los guerrilleros que quedan "cesarán la resistencia". Desde Ankara, el ministro de exteriores turco, Mevlüt Çavusoglu, aseguró que en Alepo continúa el fuego cruzado y pidió a todas las partes que respeten la tregua acordada.

Los combates entre las fuerzas leales al presidente Bachar al Asad y los insurgentes prosiguen en las zonas de contacto entre las barrios en poder de los opositores y los que están en manos de las autoridades, dijo el Observatorio. La ONG agregó que se han registrado también bombardeos de aviones no identificados contra los distritos controlados por los rebeldes, que han causado un número indeterminado de heridos.

Niños sirios huyen de Alepo. / REUTERS

Los habitantes de la parte oriental de la ciudad pasaron el día haciendo las maletas y quemando posesiones personales para preparar su partida, siempre con el miedo a un posible saqueo por parte del ejército sirio y sus aliados iraníes. Según datos del Observatorio, unas 15.000 personas iban a abandonar Alepo, de las que 5.000 eran insurgentes y 10.000 civiles, entre los que hay familiares de combatientes.

Siria va a cumplir seis años en guerra el próximo mes de marzo. Las cifras no dejan de escandalizar: más de 300.000 muertos, 12 millones de desplazados y cinco de ellos, fuera del país. La información que llega sigue siendo difusa: desde que empezó la contienda, ha habido 26 periodistas secuestrados.