La noche electoral deja tres titulares en el área metropolitana de Barcelona: Xavier García Albiol (PP) arrasa en Badalona, Gabriel Rufián (ERC) no consigue quebrar la mayoría absoluta de Núria Parlon (PSC) en Santa Coloma de Gramenet y, en general, el cinturón rojo sigue perteneciendo sin duda al PSC, que resiste en los feudos históricos y recupera posiciones. ERC, con un bajón de resultados en toda Catalunya, no logra el objetivo de romper con la hegemonía socialista en la zona y baja en representación en la mayoría de municipios metropolitanos. 

Por otra parte, Comuns y CUP retroceden, Junts no logra crecer -salvo la victoria en Barcelona-, y PP y Vox entran en la mayoría de municipios mejorando mucho los resultados. Los socialistas ganan en sus principales bastiones, como Santa Coloma de Gramanet, Cornellà de Llobregat, Sant Boi y Esplugues, donde mantienen la mayoría absoluta, mientras que la pierden -pese a quedar en primera posición- en L'Hospitalet, Viladecans y Gavà. También ganan en Montcada i Reixac, feudo histórico de los Comuns, de ICV y PSUC.

Badalona, en manos de Albiol

Xavier Garcia Albiol, por su parte, logra una mayoría inédita para el PP en Badalona, logrando 18 de los 27 concejales. En 2019 obtuvo 11. El principal partido en la oposición será el PSC, con cuatro, seguido de ERC, con dos; En Comú Podem, con otros dos, y el Guanyem de Dolors Sabater, con un edil. Junts pierde al concejal que tenía y se queda fuera.

En el anterior mandato, pese a ganar al PP, Badalona tuvo tres alcaldes: Álex Pastor, del PSC, que dimitió tras conducir bebido y saltarse el confinamiento; Albiol, que duró año y medio, y Rubén Guijarro, también socialista, que llegó al poder tras una moción de censura a raíz de la aparición del popular en los papeles de Pandora. Por tanto, lejos de conseguir la consolidación de Guijarro, los socialistas pierden esta alcaldía.

Rufián y Graells no rompen la hegemonía socialista

En L'Hospitalet, segunda ciudad de Catalunya, el PSC gobierna desde la restauración de la democracia y esto no cambiará en este mandato. Núria Marín revalidará el cargo que ostenta desde hace 15 años, aunque en esta ocasión sin mayoría absoluta. Pierde un concejal y logra 13, sin que eso beneficie a ERC, que también pierde uno.

Los republicanos presentaban al exsocialista Jaume Graells como cabeza de lista, quien destapó el caso Consell Esportiu. Ciudadanos desaparece y el PP gana fuerza (pasa de uno a cuatro concejales) y VOX entra con tres. Los comunes se mantienen en tres. Junts se queda, de nuevo, fuera.

En Santa Coloma, los socialistas obtienen 17 concejales, los mismos que en 2019, cuyos resultados permitirán a Núria Parlon revalidar un cargo que ostenta desde 2009. En total, el PSC gobierna la ciudad desde 1991. Con estos resultados, Gabriel Rufián fracasa en el objetivo de romper la hegemonía socialista y sólo gana un concejal más, con un total de cuatro. Los comuns pierden a los tres concejales que tenían y quedan fuera, mientras que Ciutadans aguanta, pasando de cuatro a dos, y PP y VOX entran con dos, respectivamente. Junts tampoco logra representación.

Cornellà, Sant Boi y Esplugues repiten absoluta del PSC

En Cornellà, Sant Boi y Esplugues los socialistas revalidan mayorías absolutas y repetirán al frente del consistorio Antonio Balmón, Lluïsa Moret y Pilar Díaz. Sant Boi es otro de los bastiones socialistas desde hace 44 años. En un patrón similar, en los tres municipios entran con relativa fuerza PP y Vox, en Esplugues entra Junts con un concejal (en los demás no tiene representación) y bajan ligeramente ERC y comuns.

Castelldefels es la otra buena noticia para el PP en Catalunya, donde una mejora de resultados lo deja a las puertas de la mayoría absoluta, con 11 concejales. Aunque en 2019 también ganó, han gobernado PSC y ERC. Manu Reyes (PP) obtiene 12 concejales, PSC; cuatro; Som, tres; los comunes, tres; ERC, dos y Junts, uno.

Junts recupera Sant Cugat, histórica plaza de los convergentes, después de que un pacto entre ERC, PSC y CUP hiciera alcaldesa a la republicana Mireia Ingla en 2019 y desalojara a los de Puigdemont de un gobierno que llevaban 32 años ostentando. Ahora, el nuevo candidato, Josep Maria Vallès, mantiene a los nueve concejales mientras ERC baja dos y obtiene cuatro, el PSC baja uno y obtiene tres, la CUP pasa de tres a dos, y mientras Ciutadans desaparece entran PP (3), Vox (2) y los comuns (2).

En conjunto, sin embargo, y más allá de la victoria en Barcelona, Junts no consigue el objetivo de crecer en el área metropolitana. De los plenos donde se había quedado fuera en 2019 -L'Hospitalet, Santa Coloma de Gramanet, Sant Boi, Cornellà, Esplugues, Montcada, El Prat o Viladecans- sólo entra en Esplugues y El Prat. 

Resultados agridulces para los comuns

De los dos feudos históricos de los comuns, El Prat y Montcada, mantienen el primero y pierden el segundo en manos del PSC. En El Prat, el hasta ahora alcalde Lluís Mijoler pasa de 11 a nueve concejales. El PSC también baja, de siete a seis, ERC se mantiene en tres, Podemos desaparece y entran PP (2), Vox (2), Jóvenes y Pensionistas (2) y Junts (1). 

En Montcada, la actual alcaldesa, Laura Campos (En Comú Podem) pasa de siete a cinco concejales y se queda por detrás del PSC, que hace el sorpasso subiendo de seis a siete concejales. ERC obtiene cuatro y los tres de Ciutadans se los comen PP (2) y Vox (1). También entra Vivim Montcada i Reixac (2).

En Sant Feliu de Llobregat, donde en este mandato se han partido la alcadía ERC y comuns, con el apoyo también de Junts, el PSC gana terreno y sube de seis a ocho concejales. Los comuns pasan de cinco a tres, ERC de cinco a cuatro, Junts se mantiene en dos y entran PP (2) y Vox (1). Veïns se mantiene en uno y Ciutadans desaparece.