MADRID.- Que Podemos iniciará su campaña electoral en Cádiz, la cuna del constitucionalismo español, ya se conocía. Pero hoy Pablo Iglesias ha sorprendido a los asistentes del Fórum Nueva Economía al anunciar que la cerrará en Valencia. ¿El motivo? "Es un gesto para demostrar que estamos orgullosos de nuestro país, para reconocer que la grandeza de España es la diversidad", explicó.

En un desayuno celebrado en el hotel Ritz de Madrid, el líder de Podemos aplaudió el humor con que la película Ocho apellidos catalanes ("la primera española en la que he oído hablar en castellano, catalán, euskera y gallego", dijo) trata precisamente ese tema y aprovechó la ocasión para criticar el inmovilismo de Mariano Rajoy con respecto a Catalunya. "Si alguien ha contribuido a romper este país ha sido el PP", espetó, abogando de nuevo por adoptar una vía politica (el referéndum) que dé "encaje a la nación de Catalunya dentro de España". "Hay cosas que los españoles ya han entendido; ahora sólo falta que lo entiendan también algunos partidos políticos", agregó Iglesias tras recordar las altas cifras de apoyo al independentismo.

Con el mismo argumento, Iglesias presumió de sus listas al Congreso pese a las polémicas por las críticas de una parte de la formación de haberlas configurado con 'poca democracia interna'. "Mis listas son como España", dijo en referencia a que estaban conformadas por "una magistrada, una mujer gitana, una actriz, un guardia civil, una afroespañola y, a la vez, parados, autónomos, empresarios y trabajadores". "Por primera vez llegará al Parlamento gente normal, como ya ha ocurrido en las Cámaras autonómicas", recordó tras incidir en que cualquier ciudadano pudo someterse al proceso de primarias.

De hecho, recordó que en su formación "las decisiones fundamentales se someten a la votación de las bases", por lo que incluso dejó la puerta abierta a consultarles sobre posibles pactos de Gobierno que puedan producirse tras el 20-D. En este sentido, además, lamentó que Pedro Sánchez prefiera "entenderse con Ciudadanos o con el PP" y no con Podemos. "La única manera de que podamos entendernos con el PSOE es que nosotros estemos por encima", dijo, citando el ejemplo del Ayuntamiento de Madrid, y dejando la puerta abierta a ser presidente del Gobierno incluso aunque obtenga menos escaños que los socialistas.

No obstante, Iglesias dijo querer "salir a ganar" y se mostró confiado en que "los españoles quieren una nueva etapa, un cambio, una nueva Transición y no un nuevo búnker". De hecho, se puso la medalla de haber contribuido a cambiar España en los dos años que ha existido Podemos ("¿Quien iba a imaginar entonces que habría caras nuevas, gente joven en los partidos y que se iba a hablar de regeneración, de la lucha contra la corrupción y de un sistema fiscal progresivo o de blindar derechos sociales en la Constitución?", se preguntó) y volvió a apostar por sus propuestas como las "cinco garantías" que quiere incluir en la Carta Magna para salvar al país del "paisaje desolador" de pobreza, paro y corrupción.

De otro lado, incidió en su propuesta de Consejo de Paz como respuesta al terrorismo yihadista que ha atacado París y volvió a pedir al presidente del Gobierno que convoque una reunión con todos los partidos, pero también con "estadistas, con los mejores especialistas en resolución de conflictos" para buscar una solución que no sea enviar tropas a Siria. "No podemos formar una coalición internacional al estilo de la de Irak. Blair ya ha dicho que se equivocó y yo estoy de acuerdo", resumió el líder de Podemos y candidato a la Presidencia del Gobierno.

En este sentido, Iglesias se alegró de que Rajoy sea más "sensible y calmado" que Albert Rivera, a quien volvió a comparar con Aznar por el discurso adoptado a este respecto. "Me preocupa que haya políticos que aboguen por el control de Twitter o el envío de tropas, que haya quien culpe a los refugiados del terrorismo o quien apueste por el endurecimiento del Código Penal", lamentó. "Lo que hay que hacer es quitarle el agua al pez: la forma de combatir al Estado Islámico es quitándole su financiación", insistió, apostando también por reformar la Ley de Enjuiciamiento Criminal con el fin de acabar con el secreto bancario. "Como dice un personaje de la serie The Wire, 'para entender la clave de un crimen, hay que seguir la clave del dinero'", concluyó.