Público
Público

Las cuentas de Andalucía Cs se amarra a Vox en Andalucía y garantiza una legislatura larga para el Gobierno de coalición con el PP

Los consejeros de Hacienda, Juan Bravo (PP), y Economía, Rogelio Velasco (Ciudadanos), firman con el portavoz de Vox, Alejandro Hernández el acuerdo de presupuestos

Rogelio Velasco (Cs), Juan Bravo (PP), Alejandro Hernández (Vox), Manuel Gavira (Vox) y Francisco Serrano (Vox), posan para los fotógrafos durante la firma del acuerdo, en el Parlamento de Andalucía. Europa Press

raúl bocanegra

Al día siguiente de la sesión parlamentaria en que Vox levantó in extremis la enmienda a la totalidad al primer presupuesto del Gobierno, los consejeros de Hacienda, Juan Bravo (PP), y Economía, Rogelio Velasco (independiente, nombrado por Ciudadanos), se sentaron a firmar con los diputados del partido ultra Alejandro Hernández y Manuel Gavira el acuerdo hecho público un día antes, que se puede consultar aquí.

La foto que no quiso darle Ciudadanos a Vox durante la negociación -para la hemeroteca queda la rueda de prensa del portavoz parlamentario, Sergio Romero, “si quieren una foto, que vayan a un estudio de fotografía”- se la dio, empero, tras cerrar el acuerdo. El capítulo de gestos que Ciudadanos concedió a los ultras no se quedó en la fotografía. El documento que firmaron esta mañana Bravo, Velasco y Hernández, llevaba -como destacó con acierto el periodista Carlos Rocha en su cuenta de Twitter- en el membrete los logotipos, los sellos, de los tres partidos que, según el PP, forman el equipo del cambio en Andalucía, “las tres patas” (Vox, PP y Ciudadanos) de las que le gusta hablar al consejero de la Presidencia, Elías Bendodo, el alma del Gobierno, el cocinero en jefe. Y, a continuación, los mismos actores atendieron a los medios.

Esta vez a nadie le quedan dudas de que Ciudadanos sí pacta con Vox en Andalucía. El precio a pagar, entre otros, ha sido la normalización del discurso antifeminista al asumir el concepto “violencia intrafamiliar” y el deslizamiento por la pendiente xenófoba de Vox, al crear un órgano autonómico destinado a luchar contra la inmigración. Es decir, se entregan a Vox victorias simbólicas mucho más que modificaciones presupuestarias masivas. Dicho en otros términos, el Gobierno mantiene prácticamente intacto el presupuesto en su configuración original, pero le da a Vox aliento en lo moral, en el terreno de los valores, que es en el que quiere jugar en este momento el partido ultra.

Según dijo el el líder de Ciudadanos en Andalucía y vicepresidente del Gobierno, Juan Marín, la fórmula de negociación fue la siguiente: Vox presentó una serie de propuestas que afectaban a diferente consejerías y cada una de ellas había ido respondiendo para poder finalmente plantear un acuerdo como el negociado. Así, señaló que todas las consejerías, las del PP y las de Ciudadanos, han negociado con Vox. “Igual que con el resto de fuerzas hemos tenido esa disposición, aunque PSOE y Adelante no hayan querido entrar en ese diálogo”, apostilló.

Dos presupuestos

Con esta decisión, tras la firma del acuerdo y después de haber sentado las bases para la aprobación también del presupuesto del año que viene, Marín -y su jefe Albert Rivera- se garantizan una legislatura larga para el Gobierno que preside Juanma Moreno, quien, tras unos días complicados, en los que aguantó el tipo con cierta calma, sale reforzado del órdago de Vox. “Bien está lo que bien acaba”, manifestó, aliviado, el presidente esta mañana en la Cadena Cope.

La situación política, las consecuencias del acuerdo, la resumió, en esta ocasión, con cierta clarividencia expositiva, el portavoz parlamentario del PP, José Antonio Nieto, en un mensaje dirigido a la izquierda. “Venían con la esperanza de que nos quedásemos sin presupuestos y ahora se han encontrado que tenemos dos, el de 2019 y el de 2020". Es decir, una legislatura larga, lo que buscaba desde el minuto uno el presidente Juanma Moreno.

En esta línea, Marín, una vez que el presidente de Vox, Santiago Abascal, resucitó desde Madrid el presupuesto, dijo a los periodistas: “Andalucía necesitaba este mensaje de estabilidad y de tranquilidad. Ahora queda gestionar y hacer las cosas mejor que los antecesores porque ese es el gran reto de este gobierno del cambio”, según recoge Europa Press.

Esto fue lo que contó también el consejero Velasco para justificar el acuerdo: la estabilidad del Gobierno se traducirá en confianza para inversores y mercados. El gran objetivo declarado del Ejecutivo de Moreno es mejorar las tasas de paro estructural de Andalucía, de las más altas del país, y para ello, se dispone a aplicar el recetario liberal. Bajos impuestos con la esperanza de que generen dinamismo económico.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias