Albert Rivera ha dimitido este lunes. Tras 13 años como presidente de Ciudadanos, la formación se queda sin su líder, que ha anunciado su salida de la política activa tras obtener 10 escaños el pasado domingo, perdiendo 47 respecto al 28-A. A partir de ahora es el Consejo General -el máximo órgano del partido entre Asambleas Generales, compuesto por 125 miembros- el que toma las riendas del partido hasta que en dos semanas este mismo Consejo designe una gestora -con un máximo de 15 miembros- y ponga la fecha del congreso extraordinario que no solo decidirá el liderazgo de Ciudadanos, también el rumbo ideológico del partido. Rivera no ha dicho en público- y tampoco en privado, según detallan fuentes presentes en la reunión- el nombre de la persona que quiere que le suceda. 

Los estatutos del partido determinan que tiene que pasar un mínimo de cuatro meses hasta la celebración del congreso extraordinario -aunque desde el partido destacan que este requisito se puede eliminar, para que este evento tenga lugar antes- que determinará quien se hace con las riendas de la formación 'naranja'. Si se siguiera el plazo, no sería hasta marzo de 2020 cuando se conozca el nombre de la persona que se hará con las riendas de Ciudadanos.

Las candidatas con más posibilidades: Inés Arrimadas, el tándem electoral del Rivera estas elecciones y fiel apoyo en Catalunya. Begoña Villacís, vicealcaldesa de la capital y otro de los rostros más conocidos de la formación. Luis Garicano, enmarcado en el sector crítico de la formación por oponerse al veto al PSOE y jefe de filas en el Parlamento Europeo. Ignacio Aguado, vicepresidente de la Comunidad de Madrid, que reivindica a un Cs "centrado", en lugar de estar tan decantado hacia la derecha. 

El presidente del Consejo General es Manuel García Bofill, un hombre prácticamente desconocido para la opinión pública. En el aire queda saber a quién designará el partido para acudir a la convocatoria que hará el rey Felipe VI para conocer la postura de la formación de cara a la investidura. También quien será la persona encargada de acudir a La Moncloa cuando Pedro Sánchez así lo requiera.

Por el momento, todo son incógnitas. Fuentes del partido señalan que lo más conveniente sería llegar al congreso extraordinario -la quinta Asamblea Nacional de la formación- con un mensaje de unidad y eligiendo un candidato de consenso que, previsiblemente, tendría que ser elegido mediante primarias por la militancia.