Como era lo previsible, la Ejecutiva Federal del PSOE ha dado su visto bueno para que el PSE pueda renovar la "fórmula de colaboración" con el PNV en Euskadi y dé su apoyo al Gobierno de Íñigo Urkullu.

La candidata socialista, Idoia Mendía, siempre apostó por este vía durante la campaña electoral, rechazando cualquier posibilidad de un pacto por la izquierda con Bildu y Unidas Podemos, aunque los tres partidos sí suman mayoría absoluta en el Parlamento Vasco tras los resultados de las elecciones celebradas el pasado domingo.

No obstante, a nadie se le escapa que la decisión del PSE, que ahora avala Ferraz,  tiene un efecto colateral para el Gobierno de cara a la negociación de los Presupuestos Generales del Estado que se avecina, para poder buscar el apoyo de los nacionalistas vascos que también podrían ser decisivos para sacar adelante las Cuentas del Estado. 

En la reunión de la dirección socialista, a la que no asistió Pedro Sánchez, se valoraron los resultados electorales obtenidos en Galicia y en el País Vasco, que, en opinión de los socialistas, "han consolidado sus posiciones e, incluso, han mejorado en un diputado en cada uno de los territorios".

Balance "moderadamente positivo"

El PSOE, por ello, hace un balance "moderadamente positivo", porque recalca que "la estrategia de crispación y de desgate y derribo del Gobierno que está llevando a cabo la derecha no está dando efecto", según aseguran.

En este sentido, el PSOE también ha constado en la reunión el "gran fracaso" de la estrategia de Pablo Casado de "España Suma" buscando la coalición con Ciudadanos. Para los socialistas, ha sido todo un fracaso.

Además, contraponen las distintas estrategias del partido conservador en Galicia y en Esukadi, y los resultados obtenidos en cada territorio, para concluir que "el resultado es que se ve que en política las cosas no suman necesariamente y la gran estrategia de la España Suma no ha salido bien y lo que ha triunfado es la moderación que Feijóo ha interpretado durante la campaña electoral", afirman.

Por ello, los socialistas han pedido directamente al líder del PP, Pablo Casado, que tomen nota de lo ocurrido, "y abandone la crispación y la oposición bronca a remolque de la ultraderecha".