La asociación ultracatólica Heraldos del Evangelio ha publicado un anuncio en el portal Idealista donde pone a la venta la finca 'Los Alcores', en la urbanización Los Cortijos de Sevilla la Nueva (Madrid), de 198.000 metros cuadrados, que compró a finales de 2018 para levantar su megaproyecto religioso, que incluía una basílica con dos torres de 70 metros de altura. 

"Se quieren ir a otro sitio más cercano a Madrid", dice a Público el abogado de los Heraldos, José Antonio Millán. Según el representante legal de la asociación, "Sevilla la Nueva queda un poco distante de Madrid y ya han visto varios lugares propicios cerca de la capital". 

El proyecto de los Heraldos no se atiene a la normativa urbanística y medioambiental de la Sevilla la Nueva. La urbanización está clasificada como Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA), lo que limita la altura de las casas a un máximo de siete metros. La inmensa mayoría de los vecinos se opone a este megaproyecto que pretende ubicarse en una urbanización de unos cien chalés, una zona tranquila y de valor medioambiental, donde los Heraldos quieren levantar, además de la basílica, un monasterio de 5.000 metros cuadrados y una hospedería con 488 plazas de aparcamiento. 

El abogado José Antonio Millán reconoce que ha influido el conflicto urbanístico desatado para la previsible marcha de los Heraldos. "No quieren ir a un contencioso, no quieren problemas. Ya han visto sitios propicios y alguno tiene ya edificada una iglesia", dice.

Pese a lo disparato del proyecto en la Urbanización Los Cortijos, el Ayuntamiento de Sevilla la Nueva, gobernado por el PP, aprobó en septiembre pasado la primera fase del proyecto --Delimitación de la Unidad de Ejecución y su red Local con atribución del Sistema de Actuación--, que consiste en la aprobación de las lindes del terreno y las redes públicas que el consistorio debe ceder y el terreno que a su vez los Heraldos deben entregar al Ayuntamiento para zonas verdes. 

El consistorio denegó la segunda parte del proyecto, el estudio de detalle, donde constan las alturas y los volúmenes edificables, porque no cumplía con las normas urbanísticas, en relación a la altura de las torres de la basílica. "Ahora los Heraldos tendrán que decidir si presentan otro estudio de detalle o si desisten de su plan de construir su proyecto. Pero de momento no pueden levantar ni un ladrillo", dijo en aquel momento el alcalde, Asensio Martínez, a Público. 

El anuncio de los Heraldos

Hace escasos días ha aparecido en Idealista el anuncio de los Heraldos del Evangelio. "Actualmente existen varias construcciones, una casa principal de unos 1.100 metros cuadrados y una casa auxiliar de unos 200 metros cuadrados.
No hay terrenos de estas dimensiones, con los usos que cuenta, en venta en la zona", consta en el anuncio y enumera los usos posibles: uso dotacional, asistencial, cultural, deportivo, sanitario, residencial, hostelero y religioso. "Dada la superficie de parcela, su orografía, sus vistas, su entorno natural y donde está ubicado, se considera que el mayor y mejor uso sería la implantación de una residencia de mayores", consta en el anuncio. 

Este anuncio ha levantado las alarmas de los vecinos, en parte, aliviados por saber que esta asociación ultracatólica, intervenida por la Santa Sede por escándalos como una investigación en Brasil por denuncias de maltrato psíquico y físico a los fieles, puede acabar marchándose a un lugar más indicado. Pero, por otra parte, no terminan de creérselo. 

Los vecinos no se lo creen

Marina Bretos, presidenta de la Asociación de Vecinos La Voz de Sevilla la Nueva, indica a este periódico que "no se lo creen". "Creemos que es una cortina de humo del alcalde, en connivencia con los Heraldos, hasta llegar a las elecciones. Si concurriera a las elecciones estando señalado por haber aprobado el proyecto de ciudad religiosa creo que le iría mal. Después de las elecciones, el asunto va a proseguir. No creemos que los Heraldos hayan comprado una finca para rendirse".

A finales de 2018 la Asociación Cultural Salvadme Reina de Fátima, inscrita en el Registro Nacional de Asociaciones en 1999, una de las denominaciones de los Heraldos del Evangelio --otra, es Caballeros de la Virgen--, compró a los herederos del político y empresario Miguel Boyer la parcela y sobre ella los Heraldos mantienen una hipoteca de 1,9 millones de euros, según ha podido comprobar este diario. 

La finca de casi 200.000 metros cuadrados la venden por siete millones de euros. "Posibilidad de segregación en parcela mínima de 32.000 metros cuadrados", advierten los Heraldos. Una cantidad, la de siete millones, que supone un auténtico "pelotazo", en palabras de varios expertos inmobiliarios consultados por este diario.

El alcalde rechaza que sea una estrategia electoral

El alcalde, por su parte, asegura que se ha enterado de que los Heraldos ponen en venta la parcela por el anuncio. Rechaza que se trate de una "cortina de humo": "No hay más, el proyecto se ha tumbado y los Heraldos verán lo que hacen con su parcela. No tiene nada que ver con el Ayuntamiento ni con las elecciones de mayo", dice Asensio Martínez.

"Entiendo que venden porque no pueden desarrollar su proyecto. El Ayuntamiento ha actuado conforme a la legalidad en todo momento", insiste en alcalde. 

Pero no todos piensan así. "Desde el minuto uno de este conflicto, el alcalde se ha puesto al lado de los Heraldos-- dice Marina Bretos--, en vez de ponerse al lado de los vecinos. Ha apoyado la construcción de una basílica que parece La Almudena de Madrid enclavada en una urbanización residencial y protegida por sus aves". 

Hay que recordar que el alcalde asistió junto con el obispo de Getafe, en mayo de 2019, a la celebración de la futura construcción en la finca 'Los Alcores' del proyecto de ciudad religiosa de los Heraldos. Por entonces, el pueblo aún no conocía la noticia, ni los grupos de la oposición. La primera que escucharon hablar de los Heraldos fue en el pleno del 30 de septiembre de 2021.

Para el alcalde de Sevilla la Nueva, "lo ideal es que en esa parcela se ubique un Campus de FP o una especie de 'Ciudad del Mayor'. Estaría encantado", dice. 

Por otra parte, la convivencia entre los Heraldos del Evangelio y los vecinos no es buena. Los ultracatólicos acusaron al pueblo de la destrucción de una imagen mariana en su finca, llegando a denunciar en un vídeo persecución religiosa y anticlericalismo como el de 1936.