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Iglesias cree que Errejón debe liderar Podemos si su lista es la más votada

"El que tenga más votos tiene que asumir el liderazgo", ha defendido el secretario general del partido de cara a la votación en Vistalegre II, para la que hasta la fecha el número dos no se ha postulado como candidato a sucederle. "Uno no es líder porque se autoproclame, lo decide la militancia", ha insistido.

El líder de Podemos, Pablo Iglesias (d), y el portavoz parlamentario de Podemos, Íñigo Errejón (i), durante la sesión de control al Gobierno que se celebra hoy en el Congreso de los Diputados. EFE/Ballesteros

ALEJANDRO L. DE MIGUEL

MADRID.- Pablo Iglesias cree que Íñigo Errejón debe liderar Podemos si su lista es la más votada, a pesar de que hasta la fecha el número dos del partido ha asegurado que no se postulará a sucederle al frente de la secretaría general. "El que tenga más votos tiene que asumir el liderazgo", afirmaba el secretario general durante una entrevista en Las Mañanas de Cuatro"La lista más votada tiene que asumir el liderazgo y yo me pondría a su servicio"; "Si fuéramos en listas separadas, quien encabece la lista más votada tiene que asumir el liderazgo. Si no gana la mía, me pondría detrás. Uno no es líder porque se autoproclame sino porque le han votado", apostillaba.

Echenique: "Cuando uno se presenta con una lista a unas elecciones internas de una formación política, si esa lista es la más apoyada, la lógica democrática dice que la persona que la encabeza va a liderar el partido"

Preguntado por si a su entender el número dos está buscando esta situación, Iglesias se ha limitado a responder "no lo sé", para insistir en que él está centrado en buscar el entendimiento con errejonistas y anticapitalistas para llegar unidos a Vistalegre II. Desde diciembre, el líder del partido ha insistido en que no seguirá al frente de la formación si su documento político no es el más votado en la asamblea de refundación del partido, el segundo fin de semana de febrero. Sostiene que si su estrategia no resulta elegida por las bases sería una suerte de "secretario general florero" -en palabras de Irene Montero- un rol que Iglesias no está dispuesto a desempeñar. En esta ocasión, condiciona además su continuidad a los resultados de la votación de candidaturas.

Durante la mañana de este lunes, el secretario de Organización, Pablo Echenique, afirmaba que no cree que Errejón quiera liderar Podemos, pero apostillaba que si finalmente presenta una lista debería "tomar los mandos". "La realidad es que cuando uno se presenta con una lista a unas elecciones internas de una formación política, si esa lista es la más apoyada, la lógica democrática dice que la persona que la encabeza va a liderar el partido", afirmaba, durante una entrevista en Onda Cero. 

Hasta la fecha, Errejón y sus colaboradores más cercanos han rechazado la posibilidad de que el actual secretario político se postule para suceder a Iglesias. Los cauces creados para Vistalegre II -como ocurría en la primera Asamblea Ciudadana y en todos los procesos territoriales- establecen la posibilidad de presentar candidaturas al Consejo Ciudadano -dirección estatal- y también a la secretaría general, por separado. La lista más votada no necesariamente debe haber presentado un candidato a la secretaría general, son cauces y procesos separados, pero Iglesias sostiene que dejará su cargo si la candidatura de Errejón logra más votos. 

Por otra parte, tras la publicación del documento organizativo en el que Iglesias acepta y refuerza las condiciones de Errejón para fusionar Podemos con otras formaciones como IU, el líder del partido morado ha recordado que esta unión no se contempla a día de hoy, pero las bases para estudiar fusiones con otras formaciones son de gran importancia, y por ello el marco para contraerlas debían quedar por escrito. "Nadie en Podemos quiere la fusión", afirmaba Iglesias, recordando que ocurre lo mismo entre las filas de Izquierda Unida.

Con sus declaraciones de este lunes, Iglesias ahondaba en las ideas planteadas este domingo en una entrevista en El Mundo, en la que también avanzó que quiere restar poder a tres secretarías de la dirección: la general (que él ostenta), la política (Errejón) y la de Organización (Pablo Echenique). "Son tres secretarías superpoderosas", afirmaba hoy.


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