Juanma Moreno, presidente de la Junta de Andalucía y del PP andaluz, tras varios días de mutismo, salió este lunes al paso de la confesión de Luis Bárcenas a la Fiscalía Anticorrupción en la que implicaba a Javier Arenas, factótum del PP andaluz durante muchos años, como uno de los beneficiarios de la presunta caja B.

Moreno afirmó varias cosas en Estepona (Málaga). Por un lado, se desvinculó del asunto y lo circunscribió a otro tiempo: "Estamos hablando de algo que es pasado, pasado de más de una década y como consecuencia de lo que sucedido hace una década, hay distintas actuaciones judiciales y distintos procedimientos judiciales en marcha".

Por otro, manifestó que el PP "colabora con la justicia" y aseguró: "No queda nadie de esa etapa que haya estado directa o indirectamente implicado que esté en la actualidad en el ejercicio de la política, nadie", según recoge Europa Press.

Esto no es exactamente así. Arenas, por el contrario, sigue en activo y es hoy senador por designación autonómica. Es decir, depende su puesto de que el PP andaluz –y, por tanto, Moreno– lo presente como candidato en el Parlamento autonómico.

Arenas, aunque Bárcenas lo ha metido de lleno en su confesión de lleno en el cobro de sobresueldos en negro, presuntamente fuera del control de Hacienda, no está investigado en la causa. Moreno se agarró así a las investigaciones judiciales: "Colaboramos con la justicia y a partir de aquí, serán los jueces. Y cuando los jueces decidan: Este señor es culpable de esto, [pues] este señor es culpable".

El PSOE de Andalucía y también Unidas Podemos han venido arremetiendo contra Moreno para que explique si sabía alguna cuestión relacionada con los sobresueldos opacos e incluso le han acusado de cobrarlos él mismo. También le han reclamado que pida disculpas. A esto último, el presidente ha replicado: "El Partido Popular ha pedido disculpas a los ciudadanos por aquello, por cualquier hecho que haya sido ilegal, irregular y lo hemos hecho siempre todos, pero durante muchos años. Pero aquí lo importante ya no [es] solamente la disculpa o el perdón que se pueda pedir. Aquí lo importante es que la justicia actúe. Yo no soy juez ni debo juzgar a nadie, ni un medio de comunicación y el partido de la oposición".

Moreno afirmó además que es "evidente" que el PSOE "está utilizando un juicio que llega en un proceso electoral, y lo está haciendo de manera explícita, clara y con un nivel manipulación importante de la información, es evidente".

El papel de Ciudadanos

El PSOE dio una nueva vuelta de tuerca política este lunes, al arremeter contra Juan Marín, coordinador de Ciudadanos en Andalucía, el socio de Gobierno de Moreno. Así, el secretario de Organización del PSOE andaluz, Juan Cornejo, manifestó: "¿No tiene nada que decir Juan Marín al respecto de lo que ocurre en el seno del partido de su socio de gobierno? Dónde quedan aquellas declaraciones sobre la lucha contra la corrupción. Ciudadanos está en coalición con un partido corrupto. Ya no pide dimisiones ni aclaración de los hechos".

El portavoz adjunto de Ciudadanos en el Parlamento de Andalucía, Fran Carrillo, afirmó, por su parte, en rueda de prensa que "mañana es un mal día para los corruptos y un buen día para la regeneración democrática en Andalucía" en referencia a la aprobación este martes en el Consejo de Gobierno del anteproyecto de ley de lucha contra el fraude y la corrupción en Andalucía. Carrillo no hizo distinción alguna entre partidos, según recoge Europa Press.