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Elecciones autonómicas y municipales 2023

Murcia, Albacete, Jaén o Ciudad Real: la incógnita planea en los grandes municipios donde gobiernan PSOE y Cs

Aunque la alianza habitual del partido naranja ha sido el PP, los socialistas han gobernado con Cs estos cuatro años en varios municipios, especialmente en Castilla-La Mancha. En el PSOE confían en mantener esos Ayuntamientos pese a la desintegración de sus socios. 

El actual alcalde de Albacete, Emilio Sáez (PSOE), junto al actual vicealcalde, Vicente Casañ (Cs), en 2019 tras firmar su pacto de Gobierno municipal.
El actual alcalde de Albacete, Emilio Sáez (PSOE), junto al actual vicealcalde, Vicente Casañ (Cs), en 2019, tras firmar su pacto de Gobierno municipal. | Luis Vizcaíno (Europa Press)

Que alianza natural de Cs ha sido el PP no es ningún secreto a estas alturas. En 2019 la dirección que todavía lideraba Albert Rivera pactó con los populares una serie de Gobierno autonómicos allá donde les daban los números. Ninguno de ellos, por diferentes motivos, aguantó cuatro años. Pero a nivel municipal hubo excepciones, principalmente en algunas ciudades importantes de Castilla-La Mancha y Andalucía.

En Albacete, Ciudad Real, Guadalajara, Jaén o Granada fue el PSOE quien entró a gobernar con la formación naranja. ¿Qué va a pasar en esos lugares en mayo teniendo en cuenta la más que previsible descomposición de Ciudadanos?

En la Castilla-La Mancha de Emiliano García Page ha habido cierta estabilidad municipal entre PSOE y Cs en tres capitales de provincia. Y además el PSOE gobierna las otras dos, Toledo y Cuenca. En la localidad castellano-manchega de más población, Albacete, el pacto fue que durante la primera mitad del mandato el alcalde fuera de Cs, Vicente Casañ. La segunda mitad la encabezaría el socialista Emilio Sáez y ambos grupos se repartieron los cargos de Gobierno.

Cs contaba con cinco concejales en 2019, pero hace dos años una de ellas abandonó la formación, por lo que el equipo de Gobierno debió apoyarse en pactos puntuales para sacar las iniciativas. El Ayuntamiento, ya con Sáez a la cabeza, siguió adelante con normalidad. Hasta hace pocas semanas. 

Tras diferentes informaciones, publicadas incluso en prensa estatal, sobre la filtración de unos exámenes a las oposiciones de Policía Local, la dirección de Cs arremetió duramente contra Sáez, al que acusó de corrupto pese a que la justicia rechazó cualquier tipo de implicación en el caso. Le exigían su dimisión y, ante eso, fue el PSOE quien decidió romper el acuerdo de Gobierno.

Pero tres de los concejales, incluido Casañ, se mantuvieron del lado de su socio, haciendo más complejo el asunto. De hecho, Casañ ha destacado ahora que apoya el proyecto del PSOE para la Alcaldía. Cs inició un procedimiento de expulsión de los tres cargos públicos, pero todavía no se ha resuelto. 

En el PSOE, fuentes consultadas reconocen que las encuestas están ajustadas pero que tienen buenas expectativas incluso de poder gobernar en solitario ante la desaparición de Cs. La clave aquí será la diferencia de votos que pueda haber también entre Vox, que podría sumar con el PP pese a tener más votos que el PSOE, y lo que saque Unidas Podemos. 

En Ciudad Real también se dio el caso de repartirse el puesto de alcalde entre Cs y PSOE. En su caso, al revés, ya que comenzó la socialista Pilar Zamora y desde 2021 la alcaldesa es Eva María Masías. Los socialistas obtuvieron 10 concejales y Cs tres. En el Ayuntamiento ciudarrealeño la convivencia también ha sido estable aunque en los últimos presupuestos un concejal de Cs rompió la disciplina de voto. Algo que no afectó al pacto.

Tampoco tuvo consecuencias sobre Ciudad Real lo sucedido en Albacete. La candidata de Cs a la Junta (y también a la Alcaldía de Albacete), Carmen Picazo, fue rotunda hace un mes sobre la estabilidad en esta ciudad y separar los dos casos. También hizo lo propio el PSOE de Castilla-La Mancha, asegurando estabilidad hasta las elecciones de mayo. El resultado, según pronostican en el PSOE, estará ajustado. 

La última capital castellano manchega con un pacto entre PSOE y Cs es Guadalajara. Aquí también ganaron los socialistas, con 10 concejales, por los tres de la formación naranja. Alberto Rojo se convirtió en alcalde gracias a los apoyos de Cs. Sus tres concejales se integraron en el Gobierno y Rafael Pérez Borda se convirtió en teniente de alcalde. No se pactó alternancia como sí ocurrió en Albacete y Ciudad Real. 

Tampoco aquí ha habido diferencias visibles como sí ha sucedido en Albacete. Algunas encuestas publicadas en los últimos meses otorgan incluso la posibilidad de que el PSOE vuelva a gobernar en Guadalajara con mayoría absoluta. 

Según las fuentes consultadas en el PSOE de Castilla-La Mancha, la sensación es que el partido se consolidará como primera fuerza en estas tres capitales. Y que una parte del antiguo voto a Cs pasará a los socialistas. Otra, claro, al PP. Los populares fían entonces sus posibilidades a que Vox supere a Unidas Podemos y puedan pactar con ellos para gobernar los Ayuntamientos. 

Jaén y el caso rocambolesco de Granada

En Andalucía destaca el caso de Jaén. En la ciudad ganó el PSOE y Julio Millán se convirtió en alcalde gracias a un pacto de coalición con Cs. El Ayuntamiento se tambaleó en junio de 2021 por la decisión unilateral de tres de los cuatro concejales de la formación naranja. Decidieron abandonar el pacto con los socialistas entre rumores de una posible moción de censura junto al PP. 

Pero la dirección provincial y autonómica de Cs los desautorizó y expulsó del partido. Desde entonces, el PSOE gobierna en minoría pero mantiene el pacto con la cuarta concejal de Cs, que no siguió la estela de sus excompañeros. 

Algunas de las encuestas publicadas reflejan un resultado ajustado donde la desaparición de Cs se da por hecha. Podrían ser decisivos los votos de una nueva fuerza política local, Jaén Merece Más. Pero en el PSOE aseguran que sus datos reflejan que el actual alcalde recogerá votos de Cs y también del PP como premio a su gestión. Algunas voces incluso afirman que los socialistas podrán gobernar en solitario. 

Más rocambolesco es el caso de Granada. El resultado en 2019 fue la victoria del PSOE, con Francisco Cuenca a la cabeza. Pero un pacto complejo entre Cs, PP y Vox convirtió a Luis Salvador en alcalde pese a tener cuatro concejales frente a los siete del PP y los tres del partido ultraderechista. El mandato no fue fácil y Salvador, que años atrás era del PSOE, perdió los apoyos del PP e incluso de Cs. 

La historia acabó con la dimisión de Salvador en julio de 2021 entre amenazas del PSOE de encabezar una moción de censura. Cuenca fue investido alcalde con los votos del PSOE, Unidas Podemos y los dos que quedaban en Cs, incluido el propio Salvador.

Los dos concejales del partido naranja fueron expulsados del partido, dejando sin representación formal en el Ayuntamiento a la formación naranja con lo que esta ciudad realmente no ha tenido, aunque lo ha rozado, una alianza entre PSOE y Cs. Las expectativas de renovar la Alcaldía en el PSOE son aquí menores que en otras capitales. 

El alcalde de Murcia, José Antonio Serrano, recibe el bastón de mando en marzo de 2021 tras la moción de censura presentada de forma conjunta con Cs.
El alcalde de Murcia, José Antonio Serrano, recibe el bastón de mando en marzo de 2021 tras la moción de censura presentada de forma conjunta con Cs. / EFE

El caso particular de Murcia

Muy diferentes es el caso de Murcia. En las elecciones municipales de 2019 ganó el PP, con José Ballesta a la cabeza. Se formó entonces en el Ayuntamiento una coalición con Cs. Pero todo cambió en marzo de 2021. El PSOE y el partido naranja diseñaron una moción de censura doble, para desbancar a los populares a nivel municipal y autonómico.

Una jugada que provocó a posteriori un terremoto político a nivel nacional con la ruptura de Isabel Díaz Ayuso con Cs en Madrid, el adelanto electoral e incluso la salida de Pablo Iglesias como vicepresidente del Gobierno. 

En el Gobierno autonómico, la decisión de varios diputados tránsfugas de Cs permitió al PP de Fernando López Miras seguir en el poder. Pero en el Ayuntamiento sí cuajó, gracias también a los votos favorables de Podemos. El socialista José Antonio Serrano se convirtió en el nuevo alcalde, en coalición con Cs. Ambas fuerzas políticas han mantenido el Gobierno hasta la fecha. 

Las encuestas no son buenas para el PSOE. La última, publicada en el medio local La Verdad, indica que Ballesta y el PP sumarían más que toda la izquierda junta y rozan la mayoría absoluta, que alcanzarían con Vox. En el PSOE son conscientes de esta situación aunque confían en que la ciudadanía valore la gestión realizada estos dos años. 

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