A falta de conocer la propuesta del Gobierno para los próximos Presupuestos Generales del Estado, el Ejecutivo ya mantiene conversaciones en este sentido con los partidos que permitieron la investidura de Pedro Sánchez en el Congreso. Las formaciones del denominado bloque de la investidura aseguran que ya se están produciendo contactos para definir las cuentas que pretenden sustentar la política económica del Gobierno, cuyo principal reto es la recuperación de la crisis causada por la emergencia sanitaria del coronavirus.

No hay, al menos de momento, avances importantes en el marco de estos contactos que, según fuentes de varias de estas formaciones, se encuentran más bien en una fase inicial que pretende sentar los cimientos de las negociaciones que se darán cuando el Ejecutivo presente su proyecto presupuestario.

Los partidos del bloque de la investidura afrontan estos primeros contactos con un doble objetivo: conocer, por un lado, la estructura de la política económica que el Ejecutivo quiere impulsar con los Presupuestos, así como poner sobre la mesa las condiciones que formarán parte de las negociaciones; y aclarar, por otro lado, el papel definitivo que jugará Ciudadanos en la elaboración de las cuentas.

El acercamiento entre los de Inés Arrimadas y el Gobierno es algo que preocupa a estas formaciones desde hace meses, cuando, en plena emergencia sanitaria, Ciudadanos tuvo un papel crucial a la hora de salvar las prórrogas del estado de alarma decretado para hacer frente a la pandemia.

Hasta ese momento, la formación naranja se había posicionado junto al PP y a Vox en una estrategia de oposición frontal a la gestión del Ejecutivo; pero tras lograr los de Sánchez en varias ocasiones el apoyo de Cs al estado de alarma, ambas partes acercaron posiciones y renovaron unas relaciones que se han extendido hasta la elaboración de los Presupuestos.

Sánchez se reunió la pasada semana con buena parte de los portavoces parlamentarios del bloque de la investidura, dando inicio así a las negociaciones de los Presupuestos, que a día de hoy continúan por otros canales más informales. El primer partido en dar un paso adelante ha sido Bildu, que este lunes mostró su predisposición a acordar las cuentas en base a una serie de criterios: "solucionar el debate territorial en términos democráticos"; "impulsar políticas sociales progresistas"; y revisar una política penitenciaria, que han calificado de "excepción y venganza", aplicando la "legislación ordinaria".

PNV: Si se suma Cs, "tendríamos que poner ciertos límites"

Tanto el coordinador general del partido, Arnaldo Otegi, como la portavoz de EH Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua, avanzaron que mantienen contactos con el Ejecutivo, y anunciaron que la próxima semana se reunirán con la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo.

Los dirigentes de la formación vasca advirtieron de que en estas negociaciones "está en juego si se sigue apostando por el bloque que propició la moción de censura y la investidura o si se opta por otros agentes políticos. Estamos hablando de qué dirección va a tomar el Estado español en los próximos años", alertaron.

También en el PNV se admite que se han producido conversaciones tras la reunión de Sánchez con Aitor Esteban, aunque, según el propio portavoz del Grupo Vasco en la Cámara Baja, no se ha pasado de "las palabras genéricas". En una entrevista en el programa Egun On Euskadi de ETB, Esteban se ha sumado a la preocupación porque Sánchez pueda distanciarse del bloque de la investidura en favor de Ciudadanos en el marco de la negociación presupuestaria.

El portavoz insistió en que "lo lógico y lo natural" sería que el presidente del Gobierno se apoyara en la misma mayoría que permitió su investidura, pero precisó que "hay muchos factores y muchas cuestiones por decidir" en algunos de los actores políticos, lo que impide hacer un pronóstico claro de lo que hará el Ejecutivo.

Esteban advirtió de que, si Ciudadanos entrase en esa mayoría, "tendríamos que poner ciertos límites para que no utilicen la negociación presupuestaria para hacer política contra nosotros". Los contactos también se están dando con formaciones como Compromís o el BNG, aunque fuentes de estos partidos aseguran que no han habido avances importantes.

Sobre la participación de Ciudadanos en la elaboración de las cuentas, el partido gallego insiste en que "un partido progresista que quiere pactar los Presupuestos más progresistas, no puede apoyarse en fuerzas que se definen como liberales y pactan con otras fuerzas como el PP y Vox".