MADRID.- No es la primera vez que los periodistas especializados en cine, acreditados en el Festival de San Sebastián, se reúnen en una simbiosis no del todo natural, con sus compañeros de política. Ocurrió en los años marcados por ETA y la lucha antiterrorista y ahora ha vuelto a pasar en una situación mucho más feliz. La presencia de Pablo Iglesias en Donosti consiguió un saludable cóctel periodístico que, finalmente, resultó mucho más divertido para el público que para todos los demás.

Una ovación de varios minutos cerró la película de Fernando León de Aranoa, ‘Política, manual de instrucciones’, una producción de Jaume Roures, que acompañó al secretario general de Podemos en la presentación del filme en el Kursaal y en el coloquio posterior. “Yo en esto aguanto cuatro-ocho años más como mucho”, dijo el candidato a la presidencia del Gobierno, seguramente para acallar las constantes insinuaciones acerca de su ‘supuesta verdadera’ ambición política.

“Gente que no sabe de cultura democrática"

El debate entre Pablo Iglesias y Errejón se zanjó antes incluso de que comenzara la proyección de la película, cuando el productor de ésta sentenció: “Todo lo que se está diciendo de un supuesto enfrentamiento entre ambos es cosa de chiquillos o de gente que no sabe nada de cultura democrática”.

“Entre nosotros, en el compañerismo va implícito el debate”, añadió Iglesias, que hoy en el Festival de San Sebastián, en la sección Made in Spain, ha visto por tercera vez la película de Fernando León. “Creo que esta es una película que no tiene precedentes. Hemos dejado entrar hasta la cocina a un equipo de cine para que lo filmara todo. Yo mismo me asombraba luego de nuestra propia irresponsabilidad, nos llamaba la atención”.
“Con esta película –añadió Roures- hay que estar muy atentos, porque se desgranan muchas líneas de actuación, muchas posiciones… Esta película muestra el nacimiento de una fuerza política sin precedentes en otros sitios”.
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“El debate estratégico es definitorio"

“En nuestra forma de funcionar el debate estratégico es definitorio para entender la política. Ojalá muchas otras fuerzas políticas abrieran sus puertas como hemos hecho nosotros”, dijo Pablo Iglesias que después de la proyección en el coloquio con el público aseguró que, justamente, ese debate interno constante era “una de las claves de que nos vaya bien”.

“Se nos nota en la pinta que somos diferentes a los viejos políticos”. También se nota, según dijo Iglesias, en las relaciones con los ciudadanos y con la prensa. “Me acuerdo de un día que un periodista de La Vanguardia me dijo que les contara una cosa en off, como hacían los otros partidos y así ellos podían publicarlo. Nosotros no hacemos eso, nosotros no hemos dejado de discutir en público nunca, es más de los procesos de disensión salimos reforzados”.

Cuentas en Suiza

Poco se habló de la película en el coloquio del Kursaal, pero sí de otros asuntos, seguramente mucho más interesantes en el último día de campaña antes de las elecciones vascas. A las acusaciones contra Echenique a propósito de la polémica que se formó por la situación laboral de su ayudante, el secretario general de Podemos, después defender a su compañero, dijo: “No es lo mismo tener cuentas en Suiza que hacer chapuzas sin estar dado de alta como autónomo”.
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Esas palabras llegaron inmediatamente al público que repitió la ovación del final de la película. Aplausos que se repitieron con un tono más alegre que reivindicativo cuando señaló que “Pablo Echenique dio más explicaciones en 24 horas que Rajoy en ocho años”.

"Me dio miedo votaros"

La charla se cerró cuando Pablo Iglesias contestó a una votante del PSOE que le preguntó por el miedo que una parte de la población sentía ante la posibilidad de que Podemos llegara al poder. “Me dio miedo votaros”, dijo esta mujer. La respuesta fue contundente: “Hay gente expropiar… eso revela el éxito que ha tenido el adversario. Así que tenemos que explicar a la gente mejor nuestro programa y hacer que la gente lo entienda y confíe en nosotros. Tiene mucho más sentido seguir en una líneas de coherencia”.

Y, aunque se tratara de un encuentro en campaña electoral, Pablo Iglesias y Jaume Roures no pudieron escapar a los centenares de paseantes que estos días caminan por la calle con sus cámaras de foto a la caza de un recuerdo con algún famoso’. Se dejaron fotografiar no solo por los periodistas que poco antes habían retratado a Ewan McGregor y que después irían en busca de Richard Gere, sino también con las personas que se les acercaron para llevarse también ese recuerdo. Campaña o no, la alfombra roja manda estos días en Donosti.