El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, anunció este miércoles lo que denominó como un plan para vencer el bloqueo que desgranó en tres puntos: acelerar los plazos para que haya Gobierno en diciembre; suprimir las vacaciones navideñas y que se declare hábil enero, y la presentación inmediata del techo de gasto para unos nuevos Presupuestos a principios de año.

El dirigente socialista explicó que concretará los detalles de ese plan contra el bloqueo político este domingo (tendrá un acto político en Madrid) donde concretará fechas, contenidos políticos, propuestas y fórmulas de gobernabilidad, "para que los españoles sepan que van a contar con un Gobierno que funciona", en el menor tiempo posible.

Sánchez, en una entrevista en Telecinco, insistió en la urgencia que tiene este país de que haya un Gobierno cuanto antes que afronte los desafíos que se avecinan, entre los que citó especialmente la crisis económica que se anuncia, el conflicto con Catalunya y el Brexit.

El candidato socialista recalcó en todo momento que el PSOE es el único partido que puede desbloquear la situación y dar estabilidad al país, y dijo que es urgente romper el bloqueo político, aunque no dijo cómo piensa hacerlo.

El "trampantojo" de la "gran coalición

En este sentido, insistió en que su "ideal" es formar "un Gobierno progresista, con cierta estabilidad para aprobar los Presupuestos y coherente", e indicó que su fórmula preferida en el modelo de Portugal.

Sánchez volvió a decir que "el pacto del abrazo con Rivera es ciencia ficción" y no dudó en repetir el término "trampantojo" para rechazar la fórmula de la "gran coalición" con el Partido Popular, algo que no está en sus planes.

En cuanto a Unidas Podemos, Sánchez indicó que quiere un Gobierno de clara tendencia progresista y tímidamente siguió insistiendo en que su socio preferente es el partido de Pablo Iglesias, aunque reprochó al líder de la formación morada que tiene "una forma muy curiosa de buscar aliados, porque sólo dice cosas muy negativas contra el PSOE, y nunca hay ninguna crítica hacia PP o Ciudadanos", destacó.

Sánchez restó importancia al descenso que otorgan las últimas encuestas a los socialistas, y aseguró que confía en tener una mayoría más amplia que el 28-A para formar gobierno, asegurando que eso no significa que no acepte que no tendrá mayoría absoluta el 10-N, "pero yo nunca he dicho que no quiera compartir el poder", afirmó.