Podemos ha presentado este lunes un recurso de apelación en la Audiencia Nacional contra el auto del juez instructor del caso Kitchen, Manuel García Castellón, que rechazó imputar a María Dolores de Cospedal, ex secretaria general del PP. La formación morada solicita reanudar la instrucción y ampliarla seis meses más e imputar a Cospedal, a su marido, Ignacio López del Hierro, y a su exjefe de gabinete, José Luis Ortiz. 

También solicita al juez que los nuevos audios de Villarejo publicados a partir del mes de mayo se investiguen dentro de esta pieza del caso Tándem, la número 7. 

Hay que recordar que García Castellón decidió abrir una pieza nueva en Tándem, la 34, para investigar los nuevos audios, algunos de ellos entre Villarejo y Cospedal, que redundan en su relación y en los encargos que recibió el comisario para perjudicar a oponentes políticos del PP. El magistrado rechazó la petición de Anticorrupción para incorporar los audios a la instrucción de la pieza sobre Kitchen, a la vista de los nuevos indicios sobre la participación de la exsecretaria general del PP en la operación para arrebatar al extesorero del PP Luis Bárcenas de documentación sobre la financiación ilegal del partido.

Podemos reitera en su recurso, al que ha acceder Público, que los nuevos hechos conocidos -concretamente, los audios publicados los días 16, 18 y 19 de mayo de 2022- vienen a acreditar "la participación de miembros relevantes de la dirección del Partido Popular - y en concreto de María Dolores de Cospedal- en la dirección y ejecución de la Operación Kitchen". En dichos audios se escucha a Cospedal aludir a la "libretita" de Bárcenas y a la idoneidad de "pararla".

Según la formación de izquierdas, "estos hechos nuevos ponen claramente de manifiesto que María Dolores de Cospedal, en contra de cuanto declaró en sede judicial, estaría perfectamente al tanto de la situación y daba órdenes sobre los principales objetivos para desbaratar la acción de la Justicia contra la trama Gürtel y más específicamente, en lo que le afectaba tanto a ella como a su formación política". 

La grabación difundida por El País el pasado 7 de julio en la que se escucha decir a Villarejo: "Tengo un tema de la hostia contra Podemos"; y a Cospedal contestarle: "Es una bomba. Yo eso sí lo quiero" también aparece en el recurso de Podemos. Respecto al mismo, indica que pone en evidencia "la existencia de una trama policial que tuviera como objetivo, en connivencia con determinados medios de comunicación, la producción de pruebas falsas para dañar la reputación de formaciones políticas rivales en contexto electoral". 

La formación morada incide en la existencia de una organización criminal estable, en cuya cúpula estarían presuntamente María Dolores de Cospedal y el expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que tenía como objetivo "proteger a través de todos los medios a su alcance al gobierno del Partido Popular del escándalo de corrupción que se estaba investigando judicialmente". 

Por otro lado, prosigue el recurso, el objetivo de dicha trama orquestada en la cúpula del gobierno de Rajoy sería "perjudicar al partido político Podemos y a sus dirigentes", para lo cual "se habría ordenado la fabricación y difusión de información falsa contra la referida organización política, en clara connivencia -como los audios publicados han constatado claramente- con determinados medios de comunicación". 

"Peligro público"

Pablo Fernández, portavoz de Podemos, ha declarado en rueda de prensa: "Creemos que esta investigación es obligatoria ya que los audios de las conversaciones entre Cospedal y Villarejo evidencian su participación en la trama Kitchen y pone de manifiesto algo que debería interesar al juez, y es que Cospedal mintió en sede judicial cuando afirmó que su relación con Villarejo era solo de carácter social. Es una falsedad, es evidente que eran encuentros mafiosos que deberían investigarse hasta el final, y es inaudito que no se esté realizando". 

Pablo Fernández ha indicado también que "para buena parte de los españoles y españolas, determinados jueces constituyen un peligro público, y lo son porque muchas veces su parcialidad arrastra por el suelo el prestigio de la justicia española. Lo son porque en España hay corruptos que en ocasiones se van de rositas y no son juzgados por los tribunales en buena medida por la pasividad de algunos jueces. Lo son también porque algunos jueces son cómplices de maniobras para atacar a determinados adversarios políticos a través de la persecución judicial. Desde Podemos lo conocemos bien".

En este sentido ha añadido: "Da igual que García Castellón jamás haya logrado algún indicio sobre Podemos, da igual que la Sala superior le haya corregido en innumerables ocasiones. Los autos son una fábrica de titulares que utiliza la derecha política y mediática. Por eso, para buena parte de los españoles, algunos jueces son un peligro público y para la democracia".