MADRID.- Mariano Rajoy ha apelado a la creación de empleo como motor del crecimiento en su último acto antes del inicio oficial de la campaña electoral del Partido Popular, que tendrá lugar esta noche en el madrileño Templo de Debod. Lo ha hecho en Salamanca durante una visita a uno de los centros de Asprodes Feaps, una asociación que vela por la integración de los discapacitados intelectuales, donde valoró la labor de la entidad.

El candidato del Partido Popular afirmó que parte de los nuevos empleos que, según él, se crearán si logra gobernar tras el 26-J deben corresponder al tercer sector. “El gran objetivo nacional es crear muchos puestos de trabajo”, aseguró Rajoy, quien prometió dos millones de empleos en cuatro años. “Se puede hacer”, dijo, pero para ello es necesario votar al PP, porque “para ayudar [a este colectivo] no bastan las buenas intenciones”.

Acompañado por el presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, insistió de nuevo en uno de los ejes de la campaña: para salvar la sanidad, la educación y los servicios sociales es necesario estimular el empleo, uno de los méritos que se ha atribuido durante su etapa al frente del Gobierno. Así, añadió durante una breve intervención, habrá “más recursos y mantendremos los pilares del estado de bienestar”, lo que incluiría “ayudar más a estas personas”.

Rajoy valoró “el trabajo en beneficio” del colectivo que llevan a cabo entidades como Asprodes Feaps, que representa “una muestra de lo que es la sociedad española”, a la que calificó de “solidaria”, porque “no quiere que nadie se quede atrás”. Por ello, recalcó su “compromiso” con una entidad “que trabaja por la igualdad de todos los ciudadanos”. Para ello, recalcó que hay que llevar a cabo “una política que genere recursos para constituir una sociedad mejor”.

“Si las asociaciones del tercer sector se fijan el mismo objetivo, sin duda alguna podremos hacer un mundo mucho más justo, mucho mejor y del que nos sintamos más orgullosos”, concluyó el candidato del PP, que aludió a “instrumentos como el famoso plan de pago a proveedores”, que según él hizo posible el pago de los servicios a asociaciones del tercer sector en “una etapa difícil”, cuando “muchos ayuntamientos, diputaciones y comunidades autónomos no podían pagarles”.