MADRID.— Primero vía mensajes y este miércoles a través de una llamada telefónica, pero parece que por fin se ha desbloqueado la situación entre PSOE y Podemos, y sus dos máximos dirigentes, Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, acordaron que se volverán a reunir antes de Semana Santa para intentar llegar a un acuerdo y formar Gobierno.

Según fuentes del PSOE, en torno a las doce del mediodía, Sánchez telefoneó al líder del Podemos y la conversación ha durado unos quince minutos.

Ambos dirigentes han hablado de la crisis humanitaria que vive Europa y de la política de migración y asilo de la Unión Europea. En este asunto, Sánchez e Iglesias parecen compartir muchos pareceres a propósito de las líneas de acción a seguir al respecto.

En cuanto a la formación de Gobierno, ambos mantienen las diferencias que ya se expresaron en la primera sesión de investidura de Pedro Sánchez, pero acordaron que es positivo que normalice el diálogo entre ambas formaciones, aunque primero será a través del encuentro entre los máximos dirigentes.

Sánchez ha aceptado la reunión en la que no estará el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, una condición que para Pablo Iglesias era innegociable. Sin embargo, el PSOE incumple en parte el acuerdo que adoptó con la formación naranja de acudir juntos a todas las negociaciones y encuentros.

El PSOE defiende que esa condición sigue vigente, pero que el líder socialista tiene libertad para celebrar reuniones individuales con cualquier dirigente.

Reunión con Compromís

Por otra parte, el PSOE emitió este miércoles un comunicado valorando muy positivamente la primera reunión mantenida con los equipos negociadores de Compromís y Ciudadanos, después de la fallida investidura.

Los socialistas valoran que se haya celebrado esta primera reunión en la que aseguran que las tres formaciones políticas han expresado su voluntad de seguir hablando y han coincidido en que no se deben repetir las elecciones generales en ningún caso.

Por ello, según fuentes socialistas, han decidido seguir explorando todas las posibilidades para avanzar en un acuerdo para el denominado "gobierno de cambio". En este sentido, seguirán trabajando los equipos negociadores las próximas semanas.