Sumar propone compensar a las autonomías infrafinanciadas como primer paso en la reforma de la financiación

El pacto que alcanzaron ERC y PSC precisa de una reforma de la Ley Orgánica de la Financiación de las Comunidades Autónomas (LOFCA) para alcanzar el objetivo de máximos que plantea: que Catalunya "gestione, capte, liquide e inspeccione todos los impuestos". Pero hay letra pequeña y otros pactos paralelos. Uno de ellos, compensar los desequilibrios generados "en la vigencia del actual modelo". Es decir, establecer medidas transitorias para compensar a los territorios infrafinanciados, una demanda que excede por mucho al caso de Catalunya y que es muy importante para el grupo de Sumar en el Congreso por su dimensión plurinacional.

Sin ir más lejos, la secretaria de Comunicación de la formación, Elisabeth Duval, insistió durante una rueda de prensa este lunes que el pacto PSC-ERC abre una ventana de oportunidad para mejorar la financiación de otros territorios como "Andalucía, Región de Murcia o el País Valencià". El portavoz del grupo parlamentario, Íñigo Errejón, ha hablado este martes de la importancia de "saldar la deuda histórica con aquellas comunidades infrafinanciadas".

Fuentes de Compromís, una de las formaciones más interesadas en que se lleven a cabo acciones para compensar la infrafinanciación, en su caso del País Valencià, explican que en el grupo de trabajo abierto dentro del espacio de Sumar para fijar una posición unitaria de cara, entre otras cosas, a la negociación de los Presupuestos, se entiende como un elemento importante incluir en las próximas cuentas públicas medidas para compensar la infrafinanciación. 

Es algo que confirman desde el propio Sumar —que se apretará para avanzar en esas medidas compensatorias—, aunque especifican que eso no cambia para nada su principal objetivo de cara a la negociación presupuestaria con el PSOE: que las cuentas abunden en la "redistribución de la riqueza, la justicia social, la reducción de la jornada laboral, los permisos retribuidos, la prestación universal por crianza" y, muy especialmente, "la vivienda".

Hay que tener en cuenta que la negociación para los Presupuestos y las negociaciones de cara a la reforma de la financiación autonómica son dos cosas distintas. Para los Presupuestos, Sumar apretará por encima de todo en los términos anteriormente enumerados, aunque sin olvidar esas medidas transitorias para los territorios infrafinanciados. En el marco de la reforma de la financiación autonómica, en Sumar ven más factible avanzar rápido en esas compensaciones de la deuda para encarar, con más tiempo, la reforma de la LOFCA, que será larga y, probablemente, tediosa, pero a la que otorgan una importancia capital.

Apretar al PSOE en la negociación de cara a los Presupuestos con medidas para compensar a los territorios infrafinanciados es un planteamiento con el que coincide totalmente Més per Mallorca, otra de las formaciones bajo el paraguas del Grupo Parlamentario de Sumar. Fuentes de Compromís aclaran, en añadidura, que se puede ejercer esa compensación "tanto a través de la condonación de deuda, como a través del incremento de inversiones en el territorio".

Todas las voces del espacio de Sumar consultadas remarcan la gran relevancia que confieren a que se aprueben unos Presupuestos. "Vamos hasta el final", avisa un diputado. "Nuestra relación con el Gobierno y la comodidad en el espacio político dependen de que se aprueben los Presupuestos", advierten fuentes del entorno de una de las formaciones que integran el grupo parlamentario. A pesar de ello, empiezan a intuirse las primeras dudas.

María Jesús Montero comparece en el Senado

Este miércoles es, en cualquier caso, un día importante en términos de financiación autonómica. María Jesús Montero, que se libró de comparecer en el Congreso para dar cuenta del acuerdo entre PSC y ERC que llevó a Salvador Illa a la presidencia de la Generalitat, visitará el Senado para hacer lo propio. La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda se someterá al escrutinio de los senadores para defender el acuerdo alcanzado con la formación independentista, aunque el carácter real —y el objetivo final— del mismo son distintos depende a la parte a la que se pregunte.

Esquerra siempre lo ha defendido como un "concierto económico solidario", mientras que varias figuras socialistas, tanto desde Catalunya, como desde Madrid, han rebajado su alcance. Lo definen como parte de un camino hacia la singularidad financiera y tributaria catalana, pero niegan que se trate de un concierto. "Quien diga lo contrario, miente", deslizó la propia Montero.

Lo que, hasta el momento, ha venido a dibujar el PSOE es que el acuerdo se mueve en una zona gris. Ni sería un concierto económico —es cierto que, de forma muy consciente, esas palabras no aparecen en el documento— ni tampoco "una reforma al uso del sistema de financiación", como ella misma ha dicho.

Patxi López, portavoz socialista en el Congreso, insistió durante la mañana de este martes en que todos los debates que se están produciendo actualmente en torno al pacto entre ERC y PSC son estériles porque nadie sabe de qué se está hablando. Se refiere a que la negociación, en base al documento que se firmó el 7 de agosto, todavía se encuentra en un estadio muy incipiente. Lo cierto es que el texto es lo suficientemente amplio como para someterse a interpretación, aunque es cierto que incluye un apartado en el que se especifica que Catalunya gestionará la totalidad de sus tributos.

Con todo, la vicepresidenta y ministra de Hacienda tendrá que hacer equilibrios para, por un lado, tratar de atenuar a las voces más enervadas de su partido —Barbón, Lambán y, sobre todo, Page— y, por otro, complacer a Esquerra Republicana, que no quiere oír nada que se aleje de los términos "concierto económico" y, por el mismo motivo, a Junts per Catalunya, que nunca creyó en que se vaya a desarrollar el pacto entre socialistas y republicanos.