El futuro secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, sigue con la ronda de encuentros bilaterales con los barones regionales socialistas, en los que se habla más de economía, de la situación del Gobierno o del país, que de la composición concreta de la próxima Ejecutiva Federal, que deberá formarse en el próximo Congreso de los días 26 y 27 de julio.

Inauguró la ronda la presidenta andaluza Susana Díaz, después le siguió el presidente asturiano, Javier Fernández, y este martes pasaron por la sede de Ferraz el líder madrileño Tomás Gómez y el de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page. Otro buen número de secretarios generales acudirá este miércoles a la sede socialista de Ferraz.

Según varios interlocutores consultados que se han reunido con Pedro Sánchez, no se está poniendo en primer plano la composición de la Ejecutiva ni el reparto de cuotas territoriales. Más bien, es un primer intercambio de impresiones sobre el partido, la situación del país y un 'darse a conocer' por parte del nuevo líder socialista.

Sin embargo, hay varias cuestiones que se están apuntando en estos encuentros. La primera, es que la dirigente andaluza Susana Díaz quiere mandar en la retaguardia del partido y del Grupo Parlamentario Socialista. Y, por ello, quiere tener dos puestos claves: la secretaría de Organización del PSOE y la Secretaría General del Grupo Parlamentario Socialista, que hasta ahora ocupaba Eduardo Madina.

La presidenta andaluza aún no ha verbalizado los nombres, pero todo apunta a que, como hizo en la composición de la lista a las elecciones europeas, esperará al final para presentar a su gente en estos dos puestos claves y en algunos más. Y para que no se los discutan.

En las quinielas suena el nombre de Mario Jiménez, ex vicesecretario general del PSOE de Andalucía, para hacerse con las riendas de Ferraz en la Secretaría de Organización. Y, otro andaluz, Miguel Ángel Heredia, parece que podría ser el sustituto de Madina en la dirección del Grupo Parlamentario. No obstante, Díaz no ha dado ningún nombre a Sánchez.

Malestar entre los eurodiputados del PSOE por la primera orden directa de Pedro Sánchez de no votar a Juncker

El otro tema candente en estos encuentros está en si respetar el calendario ya aprobado de las elecciones de primarias abiertas de cara a elegir al candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno. Hay casi unanimidad para dar manos libres a Sánchez y que las fije cuando lo considere más apropiado. Todo apunta, como informó Público, a que serán tras las municipales de mayo. 'Yo le he dicho que las primarias no estorben su liderazgo', dijo uno de sus interlocutores en estos días.

Pero, además, parece estar ya asimilado en el PSOE que se convocarán primarias abiertas con la idea de que sólo se presentará Pedro Sánchez. Así lo dijo en público el líder del PSOE en Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, tras su encuentro con el futuro secretario general. Todo indica que parece que será lo más probable y se busca el escenario mejor posible para que así sea.

Y, de momento, el que aún no es el líder del partido de forma oficial, empieza a tomar decisiones importantes y a levantar las primeras ampollas. Su decisión de que los 14 eurodiputados socialistas no votaran este martes a Juncker, a pesar del pacto alcanzado entre conservadores y socialistas en la eurocámara, ha creado gran malestar.

Elena Valenciano no acudió a la votación alegando que estaba enferma. Y Ramón Jáuregui no se ha cansado de decir que lo consideraba un error, que se ha acatado la decisión por la orden de Pedro Sánchez. El malestar es amplio ante la primera gran decisión tomada por el futuro líder del PSOE, sobre todo en buena parte de los veteranos del partido.

Las quinielas de otros nombres que pueden estar en la Ejecutiva Federal vuelan por los mentideros de Ferraz. Pero aún faltan casi diez días. Si antes las direcciones del PSOE se hacían en cuatro horas y de madrugada, con tanto tiempo pueden pasar muchas cosas.