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Teresa Ribera, el dique de Sánchez para frenar el negacionismo climático de PP y Vox

La vicepresidenta será la número dos por Madrid en un momento clave sobre la cuestión del medio ambiente. Su figura brilla en el ámbito internacional. En España, pasará a la historia como la impulsora de su primera Ley de Cambio Climático.

La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, durante una sesión de control al Gobierno en el Senado, a 7 de marzo de 2023, en Madrid (España).
Teresa Ribera, durante una sesión de control al Gobierno en el Senado, a 7 de marzo de 2023, en Madrid (España). Fernando Sánchez / Europa Press

Enero de 2013. La entonces diputada del PSOE Cristina Narbona renuncia a su escaño en el Congreso para ocupar un puesto en el Consejo de Seguridad Nuclear. La sustituye un todavía desconocido para el gran público Pedro Sánchez, aunque ya había sido diputado en otra breve etapa años atrás.

El hoy presidente del Gobierno heredó el puesto que ocupaba Narbona como portavoz  de la Comisión para el Estudio del Cambio Climático. En ese contexto apareció un nombre: Teresa Ribera

La actual vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico será la número dos del PSOE, tras Sánchez, en las listas electorales de Madrid de cara al 23 de julio.

La relación entre ambos comenzó hace prácticamente una década. Ribera ya era muy conocida en el PSOE, había formado parte del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero con varios puestos dentro del Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente. 

Tras la derrota electoral de 2011, Ribera pasó al Instituto de Desarrollo Sostenible y Relaciones Internacionales (IDDRI). Narbona, según destaca en conversación con Público, recomendó a Sánchez que la tuviera en cuenta a nivel político.

Así fue posteriormente, ya que en 2015 la incorporó, ya como secretario general del PSOE, a su equipo de expertos para elaborar el programa electoral

Ya en junio de 2018, tras la moción de censura de Sánchez contra Mariano Rajoy, entró como ministra de Transición Ecológica. Con el Gobierno de coalición progresista junto a Unidas Podemos mantuvo ese puesto y se convirtió también en vicepresidenta cuarta. Desde la remodelación de 2021 es vicepresidenta tercera. 

En el entorno de Sánchez, según diferentes fuentes consultadas por este medio, definen a Ribera como "la ecologista española de más prestigio". La califican de "firme en sus convicciones", de que "no da nada por perdido" y de que ha anticipado debates antes que otros.

Su "capacidad de trabajo" y "lealtad" a Sánchez son otros valores que destacan en las filas socialistas, así como su "capacidad de gestión con mayúsculas". 

En el PSOE destacan además que "no hay un homólogo en la derecha capaz de debatir con ella" sobre estas cuestiones

En el PSOE destacan además que "no hay un homólogo en la derecha capaz de debatir con ella" sobre estas cuestiones. Y añaden su amplio conocimiento de las instituciones y organismos europeos donde se le respeta mucho. 

Narbona, con quien ha participado en diferentes actos sobre transición ecológica, destaca que haya sido capaz de incluir en la agenda política la cuestión medioambiental como una urgencia. Especialmente frente a las posiciones de retroceso que representan PP y Vox.

"Sánchez ha tenido en cuenta siempre su opinión y ambos han mostrado un compromiso claro con el medio ambiente desde el primer momento", apunta. 

La relevancia que le quiere dar Sánchez a la lucha contra el cambio climático y por la transición ecológica se ha evidenciado en más de una ocasión. Es más, el presidente dejó dicho en un documental publicado por el PSOE hace unos meses que le gustaría ser recordado por "introducir en la agenda pública de nuestro país el ecologismo en el centro del debate político". 

Ribera ya fue en las listas de Madrid en las elecciones de 2019. Lo hizo entonces como número cuatro. En la dirección de la federación madrileña se le tiene en alta estima. De hecho, ha participado en varios actos con el secretario de los socialistas madrileños, Juan Lobato.

Y ya concurrió como número cuatro en los pasados comicios. El "orden institucional" ha pesado en la decisión del presidente en esta ocasión, al ser vicepresidenta y no concurrir en ninguna lista Nadia Calviño. 

Desde la dirección del PSOE de Madrid destacan que Ribera se ha implicado mucho con la tarea de partido durante la campaña del 28 de mayo. "Es aparentemente muy técnica pero tiene una vena mitinera que le sale de forma muy pasional. Tiene un tono sorprendente en esos actos", indican fuentes del socialismo madrileño. 

El liderazgo internacional: de las COP a la crisis energética

Donde más ha brillado la dirigente socialista ha sido en el ámbito internacional. Desde que cogió los mandos de Transición Ecológica, Ribera conseguido forjarse una imagen respetada por sus homólogos.

En la Cumbre del Clima de 2019 de Madrid, en mitad de unas conversaciones encalladas, Ribera asumió los mandos y logró sacar adelante el acuerdo climático válido para el multilateralismo

Fue en la Cumbre del Clima de 2019 de Madrid, la COP25, donde la actual vicepresidenta dejó ver su potencial negociador. En mitad de unas conversaciones encalladas por la falta de liderazgo de la presidenta de la cumbre, su homóloga chilena Carolina Schmidt, Ribera asumió los mandos y logró sacar adelante el acuerdo climático válido para el multilateralismo.

Dos años después, en la conferencia climática de Egipto, la COP27, Ribera fue designada facilitadora en las negociaciones y su posición fue clave para desatascar las diferencias abismales dentro del bloque europeo.

Una foto suya en un Consejo de Europa de 2022 resume bien la imagen que la ministra se ha labrado. Sus homólogos miran atenta a Ribera, que, en mitad de la mayor crisis energética de la última década, explica las claves de su reforma del mercado eléctrico.

La ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, rodeada por sus homólogos de otros países.
La ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, rodeada por sus homólogos de otros países. Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico

Esta aún por ver si lo que España ha conseguido aplicar con éxito –un tope sobre los precios del gas que ha supuesto el ahorro de 1.500 millones a las familias– podría ser imitado a gran escala por Bruselas, que busca impulsar en los próximos meses una transformación a gran escala del sistema energético europeo.

"Ribera ha conseguido que España pase a tener una posición relevante en la lucha contra el cambio climático en la esfera internacional y ha liderado negociaciones y avances en materia de energía en Europa, además de mantener posturas fuertes y firmes para lograr la descarbonización del continente", sostienen fuentes del movimiento ecologista español.

Renovables, Ley de Cambio Climático y Doñana

En clave nacional, la ministra ha aprobado la primera Ley de Cambio Climático de la historia de España con la que se han cerrado para siempre las explotaciones de yacimientos de combustibles fósiles en suelo y aguas nacionales.

Su gabinete dio un portazo al impuesto al sol de Mariano Rajoy y potenció al sector renovable, que ya genera más de la mitad de la energía del país

Su gabinete dio un portazo al impuesto al sol de Mariano Rajoy y potenció al sector renovable, que ya genera más de la mitad de la energía del país, según los datos de Red Eléctrica Española. Los tejados solares de autoconsumo se han convertido en una alternativa consolidada y a finales de 2022 estas instalaciones ya equivalían a la capacidad de dos centrales nucleares.

"Es cierto que su labor ha sido importante para impulsar las renovables, pero hay que decir también que las grandes eléctricas mantienen un peso importante en el mercado y que el despliegue de las renovables no se está haciendo de una forma ordenada. Se ha generado cierta burbuja, sobre todo con la llegada del hidrógeno verde", explican desde los colectivos ecologistas. 

En el plano ambiental, la dirigente socialista ha impulsado una nueva ley de residuos, ha actualizado los planes hidrológicos del país y ha puesto énfasis en la necesidad de priorizar la salud y el nivel de los caudales ante otros usos del agua.

Precisamente el agua ha sido el motivo de disputa más agudizada con las derechas en este final de legislatura: véase la pugna por el trasvase Tajo-Segura y la oposición férrea a la ampliación de regadíos anunciada por Juan Manuel Moreno Bonilla en Doñana.

Los colectivos ecologistas valoran su figura. Sobre todo cuando la vista atrás lleva al recuerdo de Tejerina y Nadal. Quedan, sin embargo, deberes por hacer. Quizá el mayor escoyo que ha encontrado en estos años al frente de las políticas verdes del país ha sido el impulso del coche eléctrico, cuya tasa de matriculación se encuentra a menos del 2% del objetivo fijado por España para finales de década. 

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