La fábrica de Damm de El Prat de Llobregat (Barcelona) ha retomado la actividad en la mañana de este viernes tras una "una incidencia informática de elevada complejidad" que afectó al sistema operativo de la compañía desde la madrugada del miércoles a raíz de un supuesto ciberataque ocurrido al comienzo de la semana.

Un portavoz de la compañía citado por la agencia Reuters explicó que el ataque informático afectó el martes por la noche a la planta barcelonesa, que produce 7 millones de hectolitros de cerveza al año, y durante unas horas quedó "totalmente paralizada". "Los servicios informáticos han hecho posible una reanudación parcial de la producción", dijo. 

El fallo provocó la paralización de la producción, periodo en el que sólo se trabajó en el envasado de barriles y "no en condiciones normales". La compañía espera restablecer la operativa habitual en los próximos días.

La empresa destacó que el servicio de alimentación y el canal Horeca (acrónimo de HOteles, REstaurantes y CAterings) no se han visto afectados y han funcionado con  normalidad, gracias a que se cuenta con "un stock importante", además de las redes de distribución y almacenes para garantizar las entregas. 

La empresa fabricante de la marca Estrella Damm no ha querido decir si se pidió un rescate a la empresa, si el grupo había pagado algo a los piratas informáticos que estaban detrás del ataque, ni si la empresa había avisado a la policía.

Varios ciberataques de gran repercusión en el último año, como el del oleoducto Colonial, que provocó el pánico en la compra de combustible en el este de Estados Unidos en mayo, han llevado a Gobiernos y empresas a revisar sus políticas de seguridad.

Un informe de la Unión Europea publicado en octubre concluyó que la pandemia del COVID-19 y el aumento del teletrabajo habían creado oportunidades para que florecieran los ciberdelincuentes y provocado la proliferación de los llamados hackers de alquiler.