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El fiscal del caso Nóos acusa al juez Castro de construir un "andamiaje sobre sospechas" contra la infanta

Pedro Horrach señala que ni la hermana del rey ni su exsecretario personal Carlos García Revenga, como tampoco el asesor del Instituto Nóos Miguel Tejeiro, realizaron actividad alguna en la entidad pese a los cargos que ostentaban en la junta directiva de la misma. 

Los fiscales anticorrupción, Pedro Horrach y Ana Lamas, en el juicio del 'caso Nóos'./ EFE

EUROPA PRESS

PALMA DE MALLORCA.- El fiscal anticorrupción Pedro Horrach ha iniciado su informe final en el juicio del caso Nóos arremetiendo duramente contra el juez José Castro -que instruyó la causa durante más de cinco años- y el sindicato Manos Limpias, única acusación que reclama pena de cárcel para la Infanta Cristina, y ha acusado al magistrado de haber construido un "andamiaje sobre conjeturas y sospechas de gran calado y aplauso mediático" para sentar en el banquillo a la exduquesa de Palma.

Durante su intervención, que ha arrancado pasadas las 9.20 horas, Horrach ha criticado que la instrucción de la causa se convirtiera en "persecución" y durante la misma se primase "la apariencia de la justicia por encima de la justicia". Y todo ello en base a "malabarismos jurídicos retorcidos y engañosos" y la utilización del "fraude de ley" para mantener acusada a la hermana del Rey Felipe VI.

El representante del Ministerio Público ha llegado incluso a alertar del "riesgo de convertir el estado de derecho en un reino de taifas procesal" y ha recriminado que, en el actual sistema penal, no puede haber resoluciones que cobijen convicciones personales" como, a su juicio, ha efectuado Castro.

En esta línea, el fiscal ha reprochado que, en una de sus resoluciones, el titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma llegase a señalar que "se desconoce por qué se deja al margen a Cristina de Borbón" en los numerosos informes que la Agencia Tributaria aportó a la causa, planteando así "dudas de tal calibre" que "la lógica implica que debiera haber solicitado aclaraciones al respecto o utilizar los mecanismos legales" pertinentes, "pero no hizo ni lo uno ni lo otro".

Sobre el papel de la Fiscalía, Horrach ha aseverado que sus miembros "no necesitan blindar nuestra independencia", puesto que "ya somos independientes o se supone que lo somos". Del mismo modo, ha apelado a la necesidad de velar por la defensa de la imparcialidad de jueces y fiscales así como "por la uniformidad en la aplicación de la Ley".

Tal y como ha recalcado, las decisiones judiciales deben adoptarse al margen "de las conjeturas que nutren los medios de comunicación" y, en este sentido, ha lamentado que "si de algo adolecen algunos es de su condicionamiento mediático", en alusión a Castro. "Una cosa son las pruebas y otra, aceptar los juicios paralelos", ha remachado.

El fiscal ha iniciado sus alegatos después de que la presidenta del tribunal haya puesto en conocimiento que, previsiblemente, el juicio quedará visto para sentencia el próximo día 22.

"Ni la Infanta ni García Revenga realizaron actividad alguna en Nóos"

Horrach ha señalado durante su intervención que ni la Infanta Cristina ni su exsecretario personal Carlos García Revenga, como tampoco el asesor del Instituto Nóos Miguel Tejeiro, realizaron actividad alguna en la entidad pese a los cargos que ostentaban en la junta directiva de la misma. "Ni estaban, ni se les espera", ha remarcado.

En este sentido, el representante del Ministerio Público ha arremetido contra el exsocio de Iñaki Urdangarin, Diego Torres, quien pese a cargar durante la instrucción de la causa contra el papel de todos ellos, "no ha aportado ni una sola prueba que acredite la participación" de los tres exintegrantes de Nóos.

A juicio de Horrach, la táctica de Torres durante la instrucción de la causa se ha basado en "el juego de las apariencias, en crear cortinas de humo y en desviar la atención con cientos de documentos", lo que en su opinión ha amparado "simples maniobras de prestidigitación".

De hecho, ha resaltado cómo a lo largo del caso Urdangarin ha señalado a Torres como el "cerebro" de una trama empresarial dirigida a apoderarse de los fondos de las Administraciones públicas, respondiendo a su vez Torres con"remesas continuas de correos y documentos a efectos de acreditar que Urdangarin colideraba el grupo junto a él".

Lo cierto, ha manifestado el fiscal, es que el Instituto Nóos se presentaba ante las instituciones "como una especie de ONG" en la que el exduque servía "de gancho", y cuyas empresas satélite "se hayaban bajo el dominio efectivo" de ambos exsocios. Al respecto, ha aseverado que ninguna de las entidades del entramado tenía vida propia -ésta era "nula" y se reduce a las juntas en las que se renovaron cargos- mientras que su "intercambiabilidad era patente".

Se trata de unas mercantiles -Instituto Nóos, Nóos Consultoría Estratégica, Intuit, Shiriaimasu y Aizoon- "invisibles para terceros" y, según ha abundado Horrach, "lucrativas para sus creadores". Es más, ha incidido en el hecho de que, con la actuación de Urdangarin y Torres, Nóos se quedó "vacío patrimonialmente" puesto que los fondos recibidos por éste desde las Administraciones acabaron en las sociedades por ellos controladas o en sus cuentas personales.

En esta línea, ha criticado que Torres se desvincule de una cuenta domiciliada en el Crédit Suisse de Luxemburgo y en el que le fueron bloqueados más de 900.000 euros.

Urdangarin siguió participando "activamente" tras su desvinculación

Horrach ha puesto de manifiesto que Iñaki Urdangarin continuó participando "activamente" en los proyectos en curso impulsados por el Instituto Nóos y "en el diseño de nuevos eventos y servicios" tras su teórica desvinculación de estas actividades, en marzo de 2006, por orden de la Casa Real.

De hecho, ha aseverado que también intervino en la puesta en marcha de la Fundación Deporte, Cultura e Integración Social (FDCIS) que, según Horrach, "perseguía continuar con los proyectos iniciados por el Instituto Nóos".

Tal y como puso de manifiesto recientemente una perito de la Agencia Tributaria durante su interrogatorio en la vista oral, Urdangarin y su exsocio Diego Torres continuaron repartiéndose beneficios dos años después de la aparente salida del exduque y, de hecho, entre 2006 y 2008, el marido de la Infanta Cristina se hizo con unos beneficios de 1,9 millones de euros.

La funcionaria señaló en esta línea que durante 2006, 2007 y 2008 Urdangarin se hizo con el 42% de los ingresos obtenidos por el entramado, mientras que Torres se apoderó del 58% restante.

Las pesquisas apuntan a que la separación de ambos en 2006 fue en realidad "aparente", como lo fue la escisión del negocio, ya que "se ha comprobado que ambos prosiguieron al menos dos años más con su actividad conjunta", según consta en un informe de Hacienda.

Horrach ha hecho referencia asimismo al sistema de reparto de beneficios que utilizaron tanto Urdangarin como Torres tras el supuesto alejamiento del exduque. Dado que Urdangarin debía dejar de aparecer vinculado a estos negocios, los socios resolvieron repartirse la cartera de clientes en aquel momento existente y al exduque se le asignaron en exclusiva determinados clientes privados de Nóos.

De este modo, el exduque pasó a percibir su alícuota de honorarios a través de dietas de consejos de administración o de consejos asesores de tales clientes, y también directamente como persona física (en el caso de uno de esos clientes: Telefónica).

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