Este artículo se publicó hace 2 años.
Los internistas del hospital que dirige la prima de Feijóo denuncian "precariedad" y "maltrato laboral"
Reclaman a la Xunta un incremento del 40% de la plantilla, recursos básicos como ecógrafos y dispositivos para medir la tensión e instalaciones como despachos.
A Coruña-Actualizado a
Los médicos internistas del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS), que dirige Eloína Núñez Masid, prima de Alberto Núñez Feijóo, han reclamado a la Xunta que dote al servicio de los medios materiales y humanos mínimos para poder atender correctamente y con garantías la demanda de asistencia del área sanitaria.
Los facultativos denuncian que la "precariedad" y el "maltrato laboral" que padecen desde hace años han provocado la fuga de profesionales a la medicina privada y la situación "límite" que ahora viven, con un enorme déficit de personal que multiplica su carga de trabajo y compromete la calidad asistencial.
El verano pasado, y ante la inacción de la gerencia, amenazaron con convocar una huelga similar a la que desarrollaban entonces sus compañeros del servicio de Otorrinolaringología, y que duró hasta principios de este mes.
El pasado junio, 280 internistas de la sanidad pública de Galicia, el 90% de los vinculados a la Xunta incluidos los jefes de Medicina Interna de los nueve hospitales más importantes de la red del Servizo Galego de Saúde (Sergas), enviaron una carta al presidente del Gobierno gallego, Alfonso Rueda; al conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, y a la gerencia del Sergas reclamando soluciones urgentes para paliar la falta de recursos.
Denunciaban que la demanda asistencial casi triplicaba la asumible en condiciones normales por la plantilla disponible, y que cada médico se veía obligado a atender una media de hasta 18 pacientes al día, cuando la recomendada por la Sociedad Española de Medicina Interna es de 8.
En el caso de los del área sanitaria Santiago, que cuenta con cinco hospitales y 34 internistas para atender a una población de más de 440.000 personas, alertaban de que sus medias triplicaban esa recomendación y que tenían las ratios de médicos por cada 100.000 habitantes más bajas de la sanidad gallega y no permiten garantizar "una atención médica digna".
Los especialistas de Compostela piden a la Xunta 15 facultativos más, es decir un ampliación de plantilla del 40%, que abra 195 camas -muchas de ellas han sido cerradas por los recortes ejecutados por los Gobiernos de Feijóo- y dote al servicio de recursos tan básicos como ecógrafos y dispositivos para medir la tensión arterial, y de instalaciones como despachos y salas de reuniones.
Así figura en el Plan Funcional que los médicos han elaborado y enviado al Sergas, tras acordar con la Xunta la necesidad urgente de cubrir todos esos déficits. "Sólo la dotación de plazas en forma de interinidades (contrato estable) podrá atraer a la masa creciente de compañeros que ha huido de la precariedad y maltrato laboral recibido en los últimos años en los hospitales públicos del Sergas hacia opciones como la medicina privada, otras comunidades autónomas e incluso otros países de la Unión Europea", advierten los médicos de Santiago en un comunicado. "No es que no haya internistas, si no que están huyendo".
Eloína Núñez Masid, nacida en Ourense y ex concejala del PP en esa ciudad, es médico y el Sergas la ascendió a la gerencia del área sanitaria de Santiago a las pocas semanas de que su primo tomara posesión como presidente de la Xunta en 2009. Años después, volvió a ascenderla a la gerencia del área sanitaria de Santiago. Antes de dejar la Presidencia de la Xunta y del PP gallego para liderar el partido a nivel estatal, la nombró vocal de la ejecutiva autonómica, donde Alfonso Rueda la ha mantenido.
Público se ha dirigido al Sergas para tratar de obtener la versión de Núñez Masid, pero al cierre de este artículo no había obtenido respuesta.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.