El juez ha acordado la medida cautelar de devolver a sus padres a la recién nacida cuya custodia les fue retirada por los informes de los Servicios Sociales de la Junta de Castilla-La Mancha, que percibían un riesgo para la bebé con el argumento de que la madre había tenido un terrible pasado que anulaba sus capacidades marentales y que deberán continuar con un seguimiento semanal porque "todavía existe un riesgo", según la resolución.

Entre los motivos para la retirada de la custodia que había argumentado Bienestar Social estaban que la madre de la bebé ha estado ingresada hasta los 18 años en distintos centros de acogida debido a malos tratos por parte de sus padres; la falta de habilidades marentales; la inexistencia de una red de apoyo para el cuidado de la niña, y la inestabilidad habitacional y económica, obviando en este punto la presencia del padre.

El abogado de los padres, Julián Sánchez Rojas, ha explicado a EFE que están "muy satisfechos" con la medida cautelar tomada por el juzgado, que ha supuesto que la niña haya sido entregada este martes a sus padres, quienes están "muy felices", según el letrado.

La bebé nació a principios de diciembre de 2024 y la Delegación Provincial de Bienestar Social de la Junta de Comunidades en Toledo retiró la custodia a sus padres pocos días después tras los informes de los servicios técnicos que mostraban un riesgo para la bebé, algo que los padres denunciaron en los juzgados.

El abogado ha explicado que el juez ha tomado la medida tras dos vistas, celebradas los días 20 y 26 de marzo, y las pruebas y conclusiones practicadas, y ha agregado que ahora el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Toledo tendrá que dictar la resolución definitiva.

Sánchez Rojas ha indicado que "la urgencia" que tenían los padres era que se adoptara la medida cautelar de entregar a la bebé y una vez que esta decisión ha sido tomada ahora queda "un procedimiento más ordinario en el que el juez, a la vista de las pruebas, determinará señalar una vista".

Seguimiento semanal

La consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, ha dicho, a preguntas de los periodistas, que la resolución del juez precisa que debe haber un seguimiento semanal con la familia a pesar de que la niña haya retornado a casa ya que "todavía existe un riesgo", como ya percibieron los técnicos de Bienestar Social cuando tomaron la decisión de retirar la custodia.

Ha subrayado que la decisión que tomaron los técnicos fue "bien acertada", según el informe del juez, y no era definitiva sino provisional, y ha indicado que "siempre es deseable que los niños y niñas vuelvan a su hogar de origen, con sus familiares".

En esta línea, la portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Esther Padilla, ha asegurado que el Ejecutivo autonómico "respeta" la decisión del juez, que ha tomado "una vez que ha conocido toda la información del expediente" y ha incidido en que, en su escrito, hace referencia a la necesidad de hacer un "seguimiento semanal" por parte de los Servicios Sociales.

"Nos alegramos de que, si las circunstancias han cambiado, haya podido volver con sus padres", ha señalado Padilla, quien ha destacado que "nadie pone en duda que la Consejería de Bienestar Social y los Servicios Sociales municipales velan por los intereses de la menor" y que lo hacen "de forma escrupulosa", con "dedicación" y con "buena fe" porque ha habido "riesgos potenciales".

Ha afirmado que la labor de los técnicos es "velar por el interés superior del menor" y que así lo reconoce también el juez en su en su escrito, en el que añade "con buen criterio" que "lo único que se ha pretendido es proteger a la recién nacida de futuros riesgos", ha dicho la consejera portavoz.