La jueza Elena Fernández Currás ha decidido admitir como "prueba de parte", aunque "sin perjuicio de su valor probatorio", el último vídeo presentado por el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) y que pretende también atribuir errores al maquinista, Francisco José Garzón, que desencadenarían el accidente del Alvia 04155. Este miércoles se ha celebrado la primera sesión del juicio por el siniestro, sucedido el 24 de julio de 2013 en el barrio compostelano de Angrois, la catástrofe ferroviaria más grave de la democracia con 80 muertos y 145 heridos. Durante el proceso, que durará al menos nueve meses, reclamarán 446 personas perjudicadas.

El macrojuicio ha arrancado a las 9.45 horas de la mañana en la Cidade da Cultura de Santiago. Durante el apartado de cuestiones previas, varias de las acusaciones que representan a las víctimas del siniestro han dejado constancia de su protesta por la inclusión del vídeo, un montaje publicado por el diario ABC.

Fernandez Currás ha asegurado que "evidentemente es una prueba de parte" con "interés legítimo de parte", pero no se ha pronunciado sobre la fuerza de su valor probatorio, que será --ha subrayado-- "el que corresponda".

"En cualquier caso, es algo tan obvio y tan conocido, porque desde el primer momento hay grabaciones de la Policía Científica, cuya imparcialidad no se discutirá, hay reportajes fotográficos de todo lo que pretende demostrar Adif de lo que se ve durante ese recorrido", ha justificado la jueza.

Eso sí, Fernández Currás ha coincidido en algunas de las dudas mostradas por las partes. "Es alguien conduciendo un tren por ese trayecto, no se sabe ni de qué día, ni cuándo, ni qué velocidad, ni quién lo grabó", ha señalado, antes de reseñar que la velocidad que toma el convoy del montaje "no es de 200 (kilómetros) por hora".

"Desde luego, cabe pensar todo lo que se quiera con respecto de un vídeo que se aporta en el año 2022", ha dicho, al responder a las impugnaciones de varias de las acusaciones, entre ellas la del abogado de la Plataforma de Víctimas del Alvia 01455, Manuel Alonso Ferrezuelo.

Para el abogado de la plataforma, por parte de Garzón "hubo un error humano, un despiste", pero considera "mucho más grave" que el exdirector de Seguridad de Adif, Andrés Cortabitarte, supiese "que había un riesgo" en la curva de A Grandeira pero "no hizo nada para evitarlo".

Acusados del accidente

En el macrojuicio abierto por el accidente ocurrido hace más de nueve años, tanto el maquinista como Cortabitarte, se enfrentan a cuatro años de cárcel por 80 supuestos delitos de homicidio, 145 de lesiones y uno más por imprudencia profesional grave.

El exdirector de seguridad de Adif ha accedido por una puerta trasera al edificio en el que se desarrolla el juicio. Por su parte, el maquinista ha entrado al edificio judicial, en silencio y visiblemente compungido, por la puerta de acceso habilitada para ello, donde se encontraba un grupo de víctimas del siniestro que reclamaban justicia.

El momento más tenso ha tenido lugar al final de la primera sesión, cuando Cortabitarte fue golpeado en la cabeza ya casi fuera del edificio por una de las víctimas, una agresión que estuvo precedida de insultos desde que salió. La seguridad se va a reforzar, ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Galicia.