Sólo tres días ha durado la alegría en casa de la familia de José Luis Rodrigo López. Este conocido comerciante de Huesca fue uno de los afortunados a los que le tocó el Gordo de la Lotería de Navidad el pasado 22 de diciembre. Sin embargo, este jueves ha tenido lugar su funeral entre la profunda consternación de sus vecinos. Rodrigo falleció el pasado lunes, el día de Navidad. Murió de forma repentina a los 84 años, según informa el Heraldo. 

El fallecido formaba parte de una saga de empresarios del textil y regentó hasta 2011 junto a su hermano unos conocidos almacenes que su padre abrió en 1949, cuando él tenía sólo 15 años.

José Luis Rodrigo se enteró de que le había tocado el Gordo cuando paseaba el pasado sábado por la ciudad, realizando unas compras, y vio el alboroto en una administración de lotería en la que se había repartido el premio. Según el Heraldo, Cuando escuchó que el número 03.347 era el que llevaba la Asociación de Antiguos Alumnos del colegio San Viator de Huesca se dio cuenta de que a él también le había tocado. Todos los años lo compraba con sus amigos y su propia tienda había patrocinado talonarios de participaciones con ese número.

El lunes por la mañana fue a cobrar el premio de los dos décimos que llevaba. Según recoge el diario oscense, esa misma noche se sintió indispuesto y lo llevaron al Servicio de Urgencias del hospital San Jorge de Huesca, donde fue ingresado en la UCI para fallecer a la mañana siguiente.

Roban 400.000 euros en la administración de Alpedrete

No es la única noticia desagradable que ha dejado la resaca del sorteo. Este jueves, la Guardia Civil ha abierto una investigación para tratar de detener a los autores del robo de 400.000 euros del interior de la administración número 1 de lotería de Alpedrete (Madrid), de nombre El Cantero, que vendió un décimo del Gordo.

Como han confirmado fuentes de la investigación, el robo se ha producido, según les han relatado los propietarios, en torno a las 8.30 horas de este jueves, cuando estaban en el interior de la administración momentos previos a la apertura.

Las mismas fuentes han explicado que, siempre según el relato de los propietarios, dos personas han accedido al local, les han amedrentado y rociado con gas pimienta y aprovechando el aturdimiento se han llevado una mochila en la que había 400.000 euros.

En cuanto a cómo han huido los ladrones o si había alguien esperándoles en el exterior con algún vehículo, han señalado que los afectados "no han podido precisar ningún dato" debido al estado de aturdimiento que provoca el gas pimienta.