La Comunidad de Madrid ha reculado en su polémico anuncio sobre las becas y ha asegurado ahora que se plantea exigir una nota mínima para que los alumnos puedan ser beneficiarios. No obstante, seguirá ayudando a las clases altas. 

En una entrevista concedida a El Mundo, el vicepresidente regional y consejero de Educación, Enrique Ossorio, considera representativo el caso de una pareja con dos hijos que gana 143.652 euros al año y estima que "forma parte de una clase media que paga muchos impuestos, trabaja mucho y no recibe nada".

Continúa el político del PP explicando que "hemos querido que 12.000 las pudieran pedir esas personas de clase media que a lo mejor tienen su sanidad privada y dicen: De mí no se acuerda nadie nunca". Sostiene Ossorio que "la situación económica está empeorando y pensamos que esas familias van a tener difícil llegar a fin de mes". 

Al ser repreguntado por la periodista, pone como ejemplo su situación personal: "Yo tengo cuatro hijos y le aseguro que cuesta muy caro sostenerlos". Y aprovecha para criticar a la oposición: "Si la izquierda y Pedro Sánchez quieren pensar que la clase media son los ricos, que lo digan, pero yo no lo voy a decir". 

Añade además que este año se ha triplicado el tope de 10.000 euros que se estableció en la anterior convocatoria porque "queríamos incrementar el número de personas que reciben las becas en las etapas no obligatorias". 

Y explica el consejero de Educación que, en lugar de mejorar las cuantías a las rentas bajas, han optado por esta alternativa porque "ante la crisis que nos viene, la manera más rápida era inyectar estas ayudas a esas familias de clase media". Sostiene además es que en la Comunidad "subiendo los niveles de renta se puede llegar a más familias y tener más libertad de elección de centro".