Un periodista mató hoy a tiros en Virginia (EEUU) a una reportera y a un cámara que informaban en directo para una cadena local de televisión afiliada a la CBS. Vester Lee Flanagan, conocido por el nombre de Bryce Williams, se pegó un tiro horas después tras huir en coche y verse acorralado por la Policía. En un principio no logró su objetivo y fue detenido por las fuerzas de seguridad y trasladado a un hospital, donde falleció.

El autor del tiroteo estuvo empleado durante un año, hasta que fue despedido por motivos que no han trascendido, en la emisora WDBJ7, para la que trabajaban los periodistas fallecidos, Alison Parker, de 24 años, y Adam Ward, de 27.

En el tiroteo (que se produjo a primera hora, cuando los reporteros hacían una entrevista en directo en la plaza Bridgewater de Moneta, una población rural del estado de Virginia) también resultó herida la mujer a la que entrevistaba Parker. Se trata de la directora ejecutiva de una cámara de comercio local, Vicki Gardner, que se recupera en un hospital tras recibir un disparo en la parte de atrás del cuello, aunque no se teme por su vida.

El atacante se aproximó por detrás a los reporteros, de manera que sólo la entrevistada podría haberle visto, y les disparó, según un vídeo publicado en internet que grabó el propio asesino y en el que puede verse su pistola.

En las imágenes que pudo grabar el cámara antes de ser alcanzado por las balas, se oyen unos disparos, se nota como la cámara cae al suelo y se desplaza, mientras se oyen gritos hasta que finalmente queda interrumpida la emisión.

El autor del tiroteo publicó mensajes en las redes sociales Twitter y Facebook sobre el suceso minutos antes y después del mismo. Aunque falta por confirmar su autenticidad, sus cuentas fueron inmediatamente suspendidas.

Flanagan se disparó a sí mismo en la autopista I-66 a su paso por el condado de Faquier, después de una espectacular búsqueda y persecución policial que se prolongó durante unas cinco horas y obligó a cerrar las escuelas del área y poner a la población en máxima alerta. La secretaria estatal de Seguridad Pública confirmó que su muerte se produjo en el hospital adonde había sido trasladado, según informó la Policía estatal.

Según dijo a la cadena televisiva CNN el director de la emisora local, Jeffrey Marks, en el medio para el que trabajaban no tenían constancia de que ninguno de los dos fallecidos hubiera recibido amenazas.