Este artículo se publicó hace 3 años.
Peces más grandes y nuevas especies llegan muertos a La Manga por sexto día
Tras múltiples críticas de asociaciones, el Gobierno de Murcia prohíbe vertir en Mar Menor para obligar al Estado a actuar.
Las brigadas municipales y de la Comunidad Autónoma de Murcia que continúan, por sexto día consecutivo, retirando los peces muertos que llegan a la orilla de La Manga han constatado que se trata de una gran cantidad de ejemplares, de mayor tamaño y de nuevas especies.
El Ayuntamiento de Cartagena, a través de Protección Civil, ha vuelto a izar la bandera roja de prohibido el baño en las playas comprendidas entre Cala del Pino y Playa Honda, donde se recogen los animales muertos.
Las brigadas están repartidas por todas las playas, y se detectan de nuevo gran cantidad de ejemplares, ya de mayor tamaño que en otros días -de hasta 20 centímetros- y especies que hasta ahora no habían aparecido, como langostinos o magres, según fuentes municipales.
Las brigadas están intensificando sus tareas de retirada de ejemplares, para evitar que se incrementen los malos olores, y trabajarán en horario durante todo el fin de semana.
#SOSMarMenor
Por otro lado, las plataformas en defensa del mar Menor han elaborado pancartas de gran tamaño para que se hagan visibles esta tarde cuando llegue la octava etapa de la Vuelta a España a La Manga, y además han convocado varias manifestaciones y concentraciones a lo largo del recorrido, como en Los Alcázares, Los Nietos y Los Urrutias, donde también han aparecido peces muertos.
Para García Varas el problema es "la agricultura intensiva y de alto impacto que vierte miles de toneladas de nitrógeno y fósforo"
El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, en sus siglas en inglés) y la Asociación de Naturalistas del Sureste (Anse) también han denunciado la situación en un comunicado conjunto. Han explicado que las muertes se han producido entre la playa de Los Alemanes y el canal de Marchamalo. Para el responsable del programa marino de WWF España, José Luis García Varas, el problema es "la agricultura intensiva y de alto impacto que vierte miles de toneladas de nitrógeno y fósforo al año".
"Si queremos que el Mar Menor sobreviva, el Gobierno murciano ha de afrontar la reconversión del sector agrícola hacia prácticas muchos más sostenibles", añade. Según sus palabras, "nos está dando señales muy claras de que necesita ayuda y tenemos que actuar para recuperarlo. Si no, estaremos viendo los últimos momentos de uno de los ecosistemas más importantes del Mediterráneo".
El pasado lunes, cuando se localizaron los primeros animales muertos en Los Nietos, ambas organizaciones ya advirtieron de que la crisis ambiental no debía darse por cerrada y de que el origen del problema podría estar lejos de las playas adonde llegaban los peces, así como de que la mortalidad podría aumentar con el paso de los días, "como lamentablemente ha sucedido".
A su juicio, el Gobierno murciano "sigue sin asumir sus responsabilidades por su inacción continuada durante décadas, mirando a otro lado, frente al incremento de regadíos ilegales y para cuyos impactos solo plantea actuaciones paliativas y no en origen".
Las medidas que ahora propone, como la oxigenación con agua de las salinas de Marchamalo, una parte de ellas completamente seca, o con mangueras microperforadas, que tuvo un efecto "muy limitado" cuando se usó antes, "se muestran inoperantes" y plantean la necesidad de constituir un comité científico independiente que trabaje con objetivos a medio plazo al margen de los intereses del Ejecutivo, concluyen.
Vertidos al Mar Menor
El Gobierno murciano prohibirá por decreto ley los vertidos al Mar Menor por la rambla cartagenera del Albujón para obligar al Ejecutivo central a eliminarlos y le pedirá que le transfiera las competencias de costas y de la cuenca vertiente para poder detener la crisis ambiental que está causando la muerte de cientos de miles de peces en sus aguas.
Tras un Consejo de Gobierno extraordinario monográfico sobre esta cuestión después de que desde el pasado lunes se venga repitiendo la llegada de peces y crustáceos muertos a las playas de la laguna salada, el presidente murciano, Fernando López Miras, ha exigido también este viernes al Gobierno central recuperar el calado de la gola de Marchamalo para intercambiar agua de la cubeta norte a la sur para oxigenar esta última, la zona donde están muriendo.
Una medida esta "más que necesaria", según los expertos del comité de asesoramiento científico de su Gobierno para el Mar Menor, que, si el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico no toma, el Gobierno murciano recurrirá a los tribunales para que obligue a hacerlo al central o autorice al autonómico a actuar cautelarísimamente
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